Por Alex Madrid / amadrid@eurohoops.net
El inicio de los playoffs de la Liga Endesa regalaba un duelo del campeón de la Euroliga frente al campeón de la EuroCup. Era una pequeña Supercopa de Europa, al menos sobre el papel o en las previas, porque se acabó convirtiendo en una exhibición del Real Madrid y el Gran Canaria sólo pudo ser espectador (95-68).
Y eso que el partido empezó raro, con un marcador muy corto (13-12) tras más de ocho minutos disputados. Pero Sergio Rodríguez acababa de entrar pista unos instantes antes y ya saben cómo se las gasta el Chacho últimamente. No sabemos si ha encontrado la fórmula de la eterna juventud o un brebaje que le haya hecho rejuvenecer 10 años, pero no hay otra explicación lógica al baloncesto que está jugando.
Sólo un tiro libre de Aleksej Nikolic manchó un parcial de 28-1 en el que el Real Madrid voló sobre el parqué. Impresionante, la vieja guardia lo había vuelto a hacer una semana después de levantar la Undécima.
Para Sergio Rodríguez (11 puntos y 3 asistencias) fue la confirmación de su gran estado de forma, para Rudy Fernández, una muestra de que su presencia sobre el parqué sigue siendo clave (+23 en 6:50 de juego) y para Sergio Llull (16 puntos), la mejor manera de convertirse en el máximo anotador en la historia del Real Madrid. Y en el partido, sólo le superaron los 20 puntos de Dzanan Musa.
El público del WiZink Center tuvo una mañana tranquila, coreando el nombre de todos los jugadores de su plantilla para acabar entonando el “¡Campeones! ¡Campeones!”. Bueno, incluso a algún exmadridista como Trey Thompkins, presente en el partido.
El Gran Canaria, tras llegar a verse 30 puntos abajo en el marcador, centró su atención en que el resultado y la diferencia no fueran históricos. Con sus interiores al mando (Olek Balcerowski y Damien Inglis lograron 15 tantos cada uno), ya no enlazaría 8 minutos sin anotar y a punto estuvo de ganar la segunda mitad. Un lujo que se podría haber permitido un Real Madrid que, a la vuelta del descanso, comenzaba a pensar en el miércoles y en el segundo partido de la serie.