Por Alex Molina / info@eurohoops.net
El BAXI Manresa ha hecho lo que nadie había hecho esta temporada: ganar en el Palau. Con un 82-83 forjado desde el triple, los de Pedro Martínez se han llevado de Barcelona un vital triunfo para sus aspiraciones coperas.
El juego alegre que siempre propone el BAXI Manresa convirtió el partido en un agradable duelo ofensivo. Las defensas brillaban por su ausencia y el encuentro se convirtió en un concurso de triples del que salió muy malparado el Barça. Hasta 14 triples -para seis aciertos- tiraron los manresanos cuando el marcador reflejaba un 14-27, con Sagnia y sus tres triples como principal verdugo azulgrana para deleite de la importante afición del BAXI Manresa hoy en el Palau, que no presentaba la mejor de las entradas.
Por mucho que lo intentara, Roger Grimau no era capaz con sus esquemas de encontrar a Willy, por lo que la reacción tuvo que ser cosa de tiempo. El pasar de los minutos benefició al Barça, que recortó ventajas hasta el 23-27 gracias a la segunda unidad. Pero fue todo un espejismo: llegaron los parciales para uno y otro equipo. Los de Pedro Martínez tenían una marcha más: cada balón dividido era para los visitantes, que devolvieron el parcial a favor de los locales y que con el 29-37 pusieron definitivamente de los nervios a los aficionados azulgranas… que se calmaron con la aparición de Laprovittola, que con su magia puso el 36-39 al descanso que sabía a gloria para los de la ciudad condal.
El paso por vestuarios nos trajo con él un nuevo protagonista. Tomas Satoransky entró en escena para conseguir que el Barça lograra lo más complicado: ponerse por delante en el marcador con el 47-44. Pero hoy no era cosa de ir al poste bajo, metodologia usada por el checo para sacar la mayoría de sus puntos, hoy tocaba festival triplista. Parecía que la premisa en los visitantes estaba clara -tirar lo máximo posible-, y si el porcentaje es bueno y la estrategia funciona, ¿para qué cambiar? Hasta 29 triples lanzaron los manresanos por tan solo 19 intentos de dos llegados al último cuarto, al que se plantaron con un 60-65 a su favor. La lluvia de triples visitantes no paró y por suerte para el Barça, Brizuela acudió al rescate.
Con 10 puntos en el último cuarto, el vasco permitió a su equipo mantenerse con vida y llegar con opciones al minuto final de partido, en el que pasó de todo. Un error garrafal de Jabari Parker le dio dos tiros libres a Dani García, que solo aprovechó el segundo. Con menos de 5 segundos por jugarse, el balón fue a parar a manos de Lapro, que no pudo anotar ni tampoco pudo hacerlo Vesely, condenando al Barça a la derrota con el 82-83 final.