Por Alex Molina / info@eurohoops.net
Definitivamente, el Barça ha vuelto a su mejor versión. Los azulgranas solventaron con mucha autoridad sus compromisos en Euroliga pero todavía faltaba el plato fuerte. La visita del Surne Bilbao Basket podía atragantárseles a los jugadores de Peñarroya, pero no ha habido problemas para certificar la presencia a la Copa del Rey de la mejor forma posible gracias al 97-84 final.
Y todo ello, a pesar de un comienzo dubitativo por parte local. Los vascos llegaron a mandar por ocho con el 12-20, haciendo trizas la defensa del bloqueo directo por parte del Barça. Por mucho que Peñarroya lo parase y se desesperase en la banda, la cosa no mejoraba con el paso de los minutos e incluso se hartó de sus jugadores, haciendo un gesto más que explícito, como diciendo que se rendía, tras tener que pedir tiempo muerto (una vez más). Todo esto pasó con 25-33 en el marcador, momento en que también ocurrió la gran noticia del día. El técnico catalán dio entrada a Willy Hernangómez, muy aplaudido en su entrada, y el Barça mejoró, cerrando la primera mitad con 42-42.
Aunque la gran reacción llegó en el tercer cuarto. Al ritmo de unos grandes Metu (15 puntos y 6 rebotes), Jabari Parker (16 puntos y 4 rebotes) y Darío Brizuela, que anotaron 11 y 10 puntos solamente en este periodo, se pasó del 48-47 al 59-47 en un visto y no visto. La ventaja azulgrana se disparó hasta el +16 con el 71-55, transformando el partido en una fiesta en la que los muchísimos niños del Palau se lo pasaban en grande y donde cada sustitución era un homenaje para el jugador que se tomaba un respiro. No tan bien iban las cosas en el banquillo visitante. Las sonrisas de la primera mitad se habían esfumado y ni el buen hacer de Abdur-Rakhman (19 puntos) permitía a los de Ponsarnau, muy enfadado y con bastante razón con los árbitros, reengancharse al partido. Nada cambió en el último periodo. Con todo decidido, las defensas brillaron por su ausencia y el partido se convirtió en un intercambio de golpes del que lógicamente salió beneficiado el Barça y sobre todo Willy (11 puntos y 8 rebotes), que se puso las botas para coronar una gran tarde para él… y para el Barça.