Por Aris Barkas/ barkas@eurohoops.net
Después de la derrota ante el Olympiacos, Xavi Pascual demostró que por encima de todo es un auténtico deportista. Durante las celebraciones de los rojiblancos pidió visitar el vestuario del Olympiacos y felicitó a todos los miembros del equipo por la victoria y la clasificación para la Final Four.
A pesar de que los catalanes se encontraban en un estado de ánimo evidente malo – con la excepción del capitán Juan Carlos Navarro ningún otro jugador habló con la prensa – el gesto de Pascual sorprendió de la mejor manera posible al Olympiacos y a los dirigentes del equipo. Como ha explicado el vicepresidente Giorgos Skindilias: “Ha demostrado que no sólo es un gran entrenador, pero también una gran persona”. Más tarde, cuando el Barcelona salió del estadio, los aficionados del Olympiacos, que todavía estaban celebrando la victoria de su equipo, también dieron a los visitantes una ovación de pie.