Por Alex Molina / info@eurohoops.net
La temporada del Herbalife Gran Canaria da para película. Nadie se podía imaginar que viendo como empezaron las cosas, el equipo insular estaría a estas alturas disputando un título continental. Pocas veces hemos visto como en un mismo equipo fallaban tantos elementos indispensables y el desastre se extendió a todos los niveles.
Uno de los primeros incendios fue el de Amedeo Della Valle. Llamado a ser uno de los líderes del proyecto tanto por pedigrí como por calidad, el italiano pidió salir del Herbalife nada más comenzar la temporada, pero no fue la única salida del equipo. Frankie Ferrari, otro nombre llamado a ser importante, también abandonó el equipo antes de tiempo de la misma forma que lo hizo Beqa Burjanadze, una salida mucho mas tardía en el caso del georgiano. La mala suerte en esta temporada era tal que cuando todo estaba preparado para que Jacob Wiley debutara con Macedonia y consiguiera así su pasaporte, el norteamericano no pudo jugar con su nueva selección en una de las ventanas de clasificación, por lo que su salida del club fue también irremediable. Earl Clark no terminó de cuajar, su condición de extracomunitario no ayudó y su paso por el club fue un visto y no visto. Y encima el Cabildo reconoció impagos a los jugadores.
Pero ninguno de estos problemas fue comparable al de Javier Beirán, capitán del equipo y que ha visto como su situación iba mejorando al mismo tiempo que lo hacía la de su equipo (probablemente no en este orden). La situación del madrileño a inicios de temporada era crítica. Apartado del equipo por una disputa con Porfi Fisac, ya que el entrenador del Herbalife entendía la capitanía de forma distinta al jugador, ha terminado siendo uno de los más importantes en la redención del equipo, algo normal en un jugador de su calidad.
Como no podía ser de otra forma, los problemas económicos, de vestuario y en la plantilla tuvieron su repercusión en los resultados del equipo. Todo esto no hubiera significado nada si el Herbalife lo hubiera ganado todo, pero la pelotita no entraba. El inicio de temporada en Liga Endesa fue pésimo y a pesar de que los resultados en Eurocup eran buenos, el juego del equipo no invitaba al optimismo. El Granca se quedó fuera de la Copa del Rey y poco tardaron a empezar las criticas a la dirección deportiva, con los recién llegados Fisac y Willy Villar en el centro de la diana.
Todo esto es agua pasada. El equipo tiene una cara totalmente distinta, compite y saca buenos resultados en Liga Endesa -los playoffs empiezan a estar cerca- y ahora está a tan solo dos victorias de volver a la Euroliga, con permiso del Valencia. Sí, ese equipo en descomposición hace no tantos meses, solamente tiene que ganarle dos partidos al Mónaco y rezar para que el Valencia no entre a los playoffs de la Euroliga para volver a la máxima competición continental. AJ Slaughter, uno de los nombres que más ha crecido en las últimas semanas está más que preparado para el reto que empezará esta tarde.
Bueno, también hay otra opción: ganar la Eurocup. Así no habría dudas sobre si jugar o no la Euroliga el año que viene. El objetivo es complicado y más teniendo que enfrentarse a la Virtus o a UNICS en la final, pero sin duda sería la guinda perfecta a una temporada para recordar.
Foto: Eurocup