Por Aris Barkas / barkas@eurohoops.net
Ha pasado casi un mes desde que el baloncesto se detuvo en todo el mundo, y la verdadera pregunta llegados a este punto parece ser más sobre el futuro a largo plazo del deporte en Europa que cualquier otra cosa.
La temporada en la mayoría de las ligas nacionales ha sido cancelada con algunas pocas pero notables excepciones como España, Turquía, Francia, Alemania, Liga ABA e Israel, que en este momento se encuentran suspendidas. Con suerte, la Basketball Champions League terminará la temporada a finales de septiembre, mientras que la mayor incertidumbre dira en torno a la Euroliga y la EuroCup. Pase lo que pase con la temporada 2019-20, el impacto de la pandemia afectará a todos los niveles, incluido la economía de los clubes.
Eurohoops preguntó a todos los equipos de la Euroliga su opinión sobre el tema, haciendo tres preguntas específicas y con el objetivo de obtener una imagen completa de un escenario en crisis y en constante evolución. De los 18 clubes, Fenerbahce, Olympiacos, Barcelona, Zalgiris Kaunas y Estrella Roja respondieron a la llamada.
“Muchas cosas serán distintas”
El general manager del Zalgiris, Paulius Motejunas, ya había concedido una entrevista con sus opiniones sobre el posible futuro; el general manager del Olympiacos, Nikos Lepeniotis, explicó a Eurohoops que en este punto la prioridad es la vida humana y también presentó un artículo con detalles económicos proyectando una pérdida del 50% en los ingresos; el presidente del Estrella Roja, Nebojsa Covic, envió un mensaje sobre la situación actual, totalmente impredecible; el Barça aclaró que, debido a las trágicas circunstancias mundiales, en este momento, declinan dar respuesta, y el general manager del Fenerbahce, Mauricio Gherardini, una de las mentes más brillantes y con más experiencia en el baloncesto europeo, fue el único que respondió a las siguientes tres preguntas.
– Con la temporada parada, ¿cuáles son los problemas que el COVID-19 ha causado al club hasta ahora?
Supongo que el COVID-19 generó, de alguna manera, las mismas consecuencias que el virus real: nos dejó sin aliento, nos quitó el oxígeno. Y el oxígeno está representado por nuestras competiciones, nuestros aficionados, nuestros patrocinadores. Representa una situación surrealista sin precedentes.
– ¿Creee que todo el panorama deportivo profesional cambiará el próximo año, especialmente en la Euroliga?
Es demasiado pronto para decir, ya que aún no tenemos todas las respuestas: todavía estamos enfrentándonos a la emergencia del COVID-19 y es razonable pensar que tomará tiempo volver a un grado de normalidad. El escenario general se verá significativamente afectado, sin duda: el tamaño de este impacto aún se desconoce en este momento.
– No le pedimos que haga predicciones pero, ¿cuál considera en este momento el posible escenario para la próxima temporada, no solo sobre las fechas sino principalmente sobre las condiciones en que operarían los clubes y se jugarían los partidos?
Todavía no tenemos todas las respuestas necesarias. La forma en que se puede controlar la emergencia del virus dictará el nuevo escenario: priorizando la salud de las personas, entonces entenderemos cómo logísticamente cualquier competición puede organizarse y ejecutarse. Muchas cosas serán diferentes y los hábitos tendrán que cambiar.