Jeff Taylor no evita la sorpresa del Estrella Roja

Alex Madrid / amadrid@eurohoops.net

El Real Madrid volvió a dejarse una victoria en casa y, esta vez, inesperada. Los blancos cayeron ante un sólido Estrella Roja por 77-79 y vuelven a perder de vista una primera plaza que se había acercado.

Bienvenidos al show de Corey Walden pareció decir Dejan Radonjic con la puesta en escena de su equipo. Desde que Jordan Loyd causara baja, muchos tiros en el Estrella Roja habían quedado sin dueño. El ex de Partizan los estuvo asumiendo con un irregular acierto… aunque se reivindicó en el WiZink Center. Sus 16 puntos en la primera mitad dieron ritmo a los serbios, ampliamente superiores durante los 40 minutos.

Pablo Laso buscó alternativas para hacerse con el control y el ritmo del encuentro tras el descanso. Castigó la juventud y visoñez de Aleksa Radanov, quien fue llevando al poste en numerosas ocasiones por Gaby Deck (10 puntos), y secó a Walden (2 puntos desde la personal en toda la segunda mitad) con un activo y hasta ese momento inédito Jeffery Taylor. El sueco jugó toda la segunda mitad a excepción de 5 segundos revolucionó el partido desde la defensa hasta ser uno de los hombres más destacados de los madridistas en ataque con 10 puntos.

Pero era insuficiente. La difencia se mantenía y los sustitutos de Nico Laprovittola (10 putnos y 10 asistencias) no ofrecían la misma fluidez ofensiva. El Madrid se había encontrado esta temporada con un equipo que cerrara la pintura como este Estrella Roja. Con una actividad de manos inusualmente alto, una cualidad que coincide en el tiempo con la llegada de Radonjic, forzaron unos porcentajes de tiro de su rival inusualmente bajo.

El Madrid apenas había anotado 11 de sus 30 primeros lanzamientos de dos y acabó utilizando el tiro exterior como medida desesperada y único recurso. En esa faceta, el más destacado fue Rudy Fernández (3 triples), pero los blancos perdieron su arma tras una dura caída en el último minuto y, de la misma manera, el partido. Tuvieron una posesión sobre la bocina para alargar el partido, pero no era el día para lanzar de dos.

Related Post