Aris Barkas / barkas@eurohoops.net
Convertir una crisis en una oportunidad es el escenario ideal y, hasta ahora, la Euroliga lo está consiguiendo al ofrecer la temporada más igualada en los 21 años de la era moderna de la competición.
La temporada 2020-21 es especial desde cualquier punto de vista posible, sin embargo, el nivel de competición durante la era COVID es simplemente próspero. Existe un verdadero desafío para clubes y jugadores, hay protocolos sanitarios y de seguridad que deben seguirse, pero el resultado final es simplemente impresionante.
Si bien en la mayoría de los casos los aficionados aún no pueden regresar a las gradas y dar su propio impulso a la acción, pueden regocijarse. Los números demuestran sin lugar a dudas que, en la quinta temporada del formato de todos contra todos, hay más paridad en la liga que nunca.
Con 211 partidos ya disputados, en comparación con las últimas cuatro temporadas después de 24 jornadas, este temporada ofrece más equilibrio entre las victorias en casa y fuera, una mejor precisión en el tiro, partidos más igualados, más prórrogas y una carrera más ajustada por los playoffs en la clasificación.
Una carrera apretada de principio a fin
Los detalles decidirán la clasificación final de la temporada regular y una semana buena o mala -especialmente en las dobles jornadas- puede poner las cosas patas arriba.
El actual líder es el Barça, con récord de 17-7, que tiene solo un 14,31% más de victorias que el 9º clasificado, que sería el primero de los equipos fuera de los playoffs. En este punto de la temporada, en las cuatro temporadas anteriores, la diferencia en victorias fue del 42%, 38%, 33% y 25%, respectivamente.
E incluso en cifras brutas, esto es obvio. Antes del Barcelona, ningún líder de la temporada regular en 24 jornadas con el formato actual había perdido hasta siete partidos. El único equipo que lideró la clasificación tras alcanzar siete derrotas al final de una temporada regular reciente fue el Real Madrid en la 2016-17, después de 30 partidos.
El porcentaje de victorias del líder de temporada respecto al resto de equipos participantes también muestra una clara tendencia esta temporada de mayor proximidad y por tanto más competitividad entre todos los equipos.
La igualdad como nota dominante
La atmósfera que la afición local puede aportar a las victorias no se midió hasta esta temporada, cuando los partidos deben celebrarse en pabellones vacíos. Este año, sin los aficionados presentes en las gradas, las victorias en casa y fuera de casa están casi equilibradas gracias a un aumento del 9,24% en las victorias visitantes durante la temporada actual, lo que demuestra la importancia del apoyo de la hinchada.
Mientras tanto, la precisión en el tiro también se ha visto afectada positivamente durante la temporada actual con la mayor precisión de tiros libres y triples bajo el formato actual, además de la segunda mejor precisión en lanzamientos de dos puntos.
Con este tipo de actuación, la temporada actual también está teniendo partidos más igualados que nunca, con un 22,7% de todos los partidos decididos por una sola canasta (3 puntos o menos), un 33,6% por 5 puntos o menos y un 61,1% por 10 puntos o menos.
¡Y la guinda del pastel son 75 minutos de baloncesto gratis hasta ahora! Las prórrogas ya no son extrañas esta temporada, con el 7,1% de todos los partidos decididos en la prórroga, un nuevo récord histórico.