Europa en juego

Por Alex Molina / info@eurohoops.net

Barça y Real Madrid se verán las caras esta noche a las 21:00 en uno de los Clásicos más apasionantes que se recuerdan. Si ya de por si estos partidos de máxima rivalidad siempre son interesantes, el de hoy tiene un premio añadido a ganarle a tu mayor rival: el que salga triunfante del Palau será el nuevo líder en solitario de la Euroliga. Tanto Pablo Laso, que no ha tenido problemas en reconocer que los dos equipos son a estas alturas los mejores de la competición, como Sarunas Jasikevicius han reconocido que se trata de un partido especial, haciendo hincapié el lituano en que los pequeños detalles marcarán el partido.

Ante tal apasionante escenario, en Eurohoops hemos querido analizar las tres claves que marcarán el signo del partido y decidirán el (de momento) mejor equipo en Europa.

1. El poderío blanco en la zona

Probablemente, la única posición en la que el Real Madrid parte con ventaja clara. A pesar de los grandísimos partidos que ha firmado recientemente Sertac Sanli, el gran asterisco en la plantilla azulgrana es en la posición de cinco, y si los blancos pueden imponer sus centímetros y músculo en la zona tendrán mucho ganado.

Hablar del juego interior del Real Madrid es hablar de Walter Tavares. El caboverdiano es en estos momentos el segundo jugador más valorado de la competición (solamente por detrás de Nikola Mirotic), segundo en rebotes con 7.2 capturas por partido y primero en tapones con 1.8. Pero es que además, Tavares está siendo un seguro de vida en ataque, con un espectacular 79.73% en tiros de dos. 

Y cuando Tavares no está -aunque no es raro verles compartir pista- aparece la otra torre, francesa en este caso. Vincent Poirier y sus 213 centímetros seguro que dejarán huella en el Palau y en los muelles de sus canastas. Su compatriota Yabusele es también un factor a tener en cuenta partiendo desde el poste bajo, una opción muy usada por Pablo Laso en el sinfín de opciones interiores del que dispone y que es de esperar que use también ante el Barça. Queda por saber el papel de Anthony Randolph, verdugo en tantas ocasiones del Barça pero que tendremos que cómo responde físicamente ante la primera prueba de alto nivel tras la lesión.

2. El factor Palau

Que el público es casi casi un jugador más es algo indiscutible. Solamente hay que ver las estadísticas para ver la incidencia del público local en las victorias de los equipos y el duro golpe que la prohibición de la entrada de espectadores supuso a los equipos que mejores resultados han sacado históricamente en su casa.

El Barça, como no podía ser de otra forma, no es ajeno a esta situación y el de hoy es el primer Clásico con aforo completo y sin restricciones desde que estalló la crisis por el coronavirus. Pero además, este partido llega con un Palau muy distinto al de los últimos años. El nivel de comunión que hay entre jugadores y afición hacía lustros que no se veía, probablemente desde el Barça que ganó la Euroliga. Los éxitos recientes del equipo han ayudado a que los culés vayan al campo con otra mentalidad, habiendo dejado atrás la desidia y la tristeza de no hace tanto tiempo atrás, pero eso no es todo.

El partido ante el CSKA, con besos al escudo de Nikola Mirotic para hacer enloquecer al Palau, fue una noche para recordar. El Palau de esa noche no era el de siempre y ese partido lo remontaron y ganaron los fans, como ya reconoció el propio Jasikevicius y nos dimos cuenta todos los presentes. La màgia del Palau en estado puro. Ese gran ambiente también se vivió en la derrota ante Baskonia y muy probablemente se vivirá hoy: al fin y al cabo, es un partido ante el Real Madrid.

3. Los que no están, los que estaban y los que acaban de llegar

Este partido será especial por todo lo anteriormente mencionado, pero hay mucho más. Thomas Heurtel y Adam Hanga volverán por primera vez a la que fue su casa… vistiendo los colores del eterno rival. A pesar de que ambos fueron de lo poco salvable del Barça de los últimos años, todo parece indicar que tendrán recibimientos totalmente opuestos: aplausos para el húngaro y sonido de viento (y alguna cosa más) para el francés.

Nicolás Laprovittola, que tomó el puente a la inversa, muy probablemente tendrá un papel muy importante ante su exequipo, ya que el Barça sigue con problemas en las posiciones exteriores. Nick Calathes, Álex Abrines y Cory Higgins siguen siendo baja, así que el argentino está llamado a volver a ser importante para los azulgranas.

Pero no todo son nombres en el apartado de bajas para los azulgrana. Dante Exum, lujoso y temporal refuerzo para las posiciones exteriores del Barça, podría debutar ante el Real Madrid. De momento el australiano ha sido inscrito en la Euroliga, así que solamente queda esperar para saber su papel para este partido.

 

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