Por Alex Molina / info@eurohoops.net
El Barça ha conseguido un trabajadísimo triunfo ante el Bayern de Múnich por 71-66 en un partido que ha sido una auténtica guerra que ha contado con un soldado inesperado. Junto a los siempre infalibles Kuric y Mirotic, Jasikevicius hoy ha contado con la vital aportación de Dante Exum, que le ha cambiado la cara del partido completamente para que el Barça sume una victoria más.
El primer cuarto fue toda una declaración de lo que íbamos a ver hoy. 9-9 tras los diez primeros minutos y ambos equipos anulándose mutuamente. No es que fallara el acierto, que también, sino que las defensas se imponían claramente a los ataques, esta vez en serio. Y esto ya le venía de perlas a los alemanes. A Trinchieri le va lo de las trincheras, llevar los partidos a que cada posesión sea una batalla, y motivos para seguir con esto no le faltan: su equipo es uno de los que más en forma está en la Euroliga.
El partido estaba trabadísimo, casi pidiendo alguien que rompiera con los esquemas, y el encargado de conseguirlo ha sido Dante Exum. El australiano y su energía han impregnado de una energía hasta entonces no vista en el Barça, que por fin encontró alguien capaz de incomodar la defensa en estático del Bayern de la mejor forma posible: no dejando que los de Trinchieri montasen su entramado defensivo.
Pero la irrupción de Exum fue un arma de doble filo. El partido enloqueció y jugadores que hasta entonces estaban desaparecidos entraron en escena. Vladimir Lucic sumó 12 de sus 16 puntos en el último cuarto. Pero si algo sabe el Barça de Jasikevicius es de adaptarse al tipo de partido. ¿Hora de bajar al barro? Se baja. ¿Intercambio de golpes en ataque? Vamos allá. Kuric y Mirotic (20 y 13 puntos) empezaron a sumar, todos ellos encontrándose con Calathes que como siempre dirigía el cotarro a la perfección, para que el Barça sumara una victoria que al final terminó siendo hasta cómoda.