Por Alex Molina / info@eurohoops.net
El Barça ha sumado el primer triunfo en la Euroliga tras imponerse al Real Madrid por 75-73. Triunfo culé que ha llegado tras tres cuartos de dominio total: con un gran Satoransky, los culés han llegado a mandar plácidamente, pero los locales se derrumbaron en el último cuarto y el Real Madrid, comandado por un gran Gabriel Deck, casi remontó el encuentro.
Si el otro día se quejaba Jasikevicius de que sus jugadores no supieron aprovechar las ventajas y los desajustes defensivos de sus rivales, hoy seguro que está mucho más contento. Los azulgranas han castigado, con muchísima paciencia y efectividad, los cambios de la defensa blanca, aunque del que más han abusado de inicio ha sido el que se producía por defecto. Tomas Satoransky ha llevado a Sergio Rodríguez al poste casi siempre que ha podido, dándole al Barça unas primeras ventajas importantísimas para ir tomando la iniciativa.
El tiempo muerto de Chus Mateo y la entrada de Walter Tavares (6 puntos y 5 rebotes), suplente de inicio, le han cambiado la cara a los visitantes. A pesar de la exhibición de Nikola Kalinic (7 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias) tanto en ataque como en defensa, cada ataque del Barça se convirtió en un suplicio. De las ventajas amplias se pasó a las apretadas, con Guerschon Yabusele (7 puntos y 7 rebotes) también entrando en escena, pero los vientos eran claramente azulgranas. Jan Vesely (13 puntos) castigando desde la media distancia y la versión más polifacética de Nicolás Laprovittola (8 puntos, 4 rebotes y 6 asistencias) permitían al Barça mandar con claridad, y solamente un triple casi sobre la bocina del pitado Mario Hezonja (9 puntos) permitió al Real Madrid irse al descanso diez abajo.
Del tenso dominio culé -es el Real Madrid así que no hay distancia insalvable- de la primera mitad se pasó a un extrañamente plácido tercer cuarto para el Barça. Como si no tocara que fuera tan fácil todo. De este modo, los blancos lograron cerrar el tercer periodo con cierta solvencia a pesar del buzzer beater de Rokas Jokubaitis (8 puntos). Y al final, el Barça volvió al principio. ¿Si la estrategia funciona, para qué cambiar? Volvió Satoransky a pista y volvió el checo a castigar a los exteriores blancos en el poste bajo. Gran partido de uno de los recién llegados al Barça y que llega en el momento que más dudas estaba generando su juego, y es que tras un inicio un tanto dubitativo, nadie necesitaba un partido así más que él: 12 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias para 22 de valoración.
¿Pero ya hablamos antes de que el rival de hoy era el Real Madrid, no? Los blancos que si algo tienen es fe, fueron acercándose y acercándose al marcador, con un Gabriel Deck (21 puntos y 3 rebotes) superlativo. El argentino anotó 13 puntos en el último cuarto para poner el 75-73 en el marcador, aunque la última no fue para él. Sergio Llull, que tuvo un partido discreto pero que ha resuelto en miles de ocasiones semejantes, fue el encargado de tirarse la última, un triple de los suyos que para suerte del Barça no entró.
Foto: FC Barcelona