Por Eurohoops team / info@eurohoops.net
El que fuera CEO de la Euroliga hasta el inicio de la presente temporada, Jordi Bertomeu, dio un paso al lado para dotar de sangre fresca a la competición. Sin embargo, muchas de las ideas que tuvo a lo largo de más de dos décadas de mandato han sido su legado a la Euroliga, que continúa muchos de los planes que comenzó.
En una entrevista para el canal de Sergio Vegas y junto a Rafa Muntión, analizó la actualidad de la Euroliga o algunos proyectos de futuro de la competición. Estos fueron algunos de los temas que trataron:
La Euroliga en Dubái:
“El tema Dubái es positivo porque vuelve a poner a la Euroliga como una entidad disruptiva, porque hace algo que nadie hace. También es peligroso si no se hace bien. Hay que ver realmente que todo lo que va a comportar para los clubes el tener que llevar partidos durante la semana a sitios tan lejanos y que ese esfuerzo sea recompensado. Hay que trabajarlo mucho y no sé en qué fase está, pero como concepto, en su momento, me pareció interesante estudiarlo”.
Los nuevos mercados:
“El futuro de la Euroliga siempre ha sido muy claro. Hay que trabajar sobre el ingreso. Y, si trabajamos sobre los ingresos, hay que reconocer que los mercados tradicionales de baloncesto van a continuar siendo importantes, pero el salto cualitativo que se puede hacer en el futuro es la incorporación de mercados fuertes. Esto está cualquier manual, no pretengo descubrir nada. A partir de aquí, nosotros hemos trabajado para tener un equipo en Londres, un equipo en París, hemos conseguido incorporar al Bayern de Múnich, hemos conseguido incorporar a Lyon… Esta estrategia de ir hacia el norte y hace los grandes mercados hace años que lo estamos diciento […]. Antes de irme he conseguido que un equipo de Londres y otro de París estén en EuroCup. Ahora hay que continuar apoyándolos y ayundándolos a subir. Es la solución. Los defensores de los principios del mérito deportivo, que sólo puedes jugar si ganas, no van a estar de acuerdo conmigo, pero no podemos tener todo. Estamos hablando de una liga que tiene el concepto de semicerrado, que seguramente irá siendo más cerrado, porque necesitas estabilidad, inversión y ofrecer una competición que sepas lo que es”.
Ampliación de la Euroliga a 20 equipos:
“El problema es que con 20 equipos necesitas, como mínimo, 10 u 11 semanas con doble jornada. Hay que ir con cuidado con la sobrecarga de partidos y hay que hacer un calendario más racional. Hay que ver si 20 encajan, con 18 vamos justos”.
Licencias para AS Mónaco y Valencia Basket:
“Si quieres hacer un pabellón de 15.000 espectadores para ofrecer una experiencia nueva a los aficionados, tienes que saber para qué lo vas a utilizar. Y no puede depender esto de que la pelota entre o salga un día. Es muy difícil encontrar a alguien que, sobre esto, apueste en serio, tienes que ofrecerle algo. Construir un pabellón son 300 ó 400 millones, no es cualquier tontería. Mónaco y Valencia son dos proyectos clarísimos de Euroliga. Mónaco va a tener su pabellón de más de 10.000 espectadores. El concepto de aspirar a estar estas ligas se debe ir a estas ideas, no sólo al resultado deportivo, aunque no hay que ignorarlo.
La “hipocresía” de las ventanas FIBA:
“Las ventanas, no las he seguido mucho. Por lo que he leído, hay entrenadores de club que también son seleccionadores nacionales y que han ido con sus jugadores del club, pero no han dejado que vayan con otras selecciones. Decimos que el equipo nacional es lo más importante hasta que nos conviene a nosotros. Hacía falta que esto pasara para que, si alguien quiere analizarlo con un poco de objetividad y poca pasión, pueda decir que es un monumento a la hipocresía […]. Esto es malo desde el origen, me parece que las selecciones nacionales sin los mejores jugadores no tiene sentido. Y esto no va a pasar mientras haya competición con el calendario NBA“.
La posición de la Euroliga con las ventanas FIBA:
“El tema de las ventanas se discutió, se habló y les convencí de que el posicionamiento de la Euroliga no podía ser distinto al de la NBA. Nuestros clubs no son de segunda división, nuestros propietarios merecen el mismo respeto que los propietarios de la NBA y nuestros jugadores no son de segunda división. Cuando se decidió, se decidió. Nadie preguntó, nadie dudó y nadie pidió cambios de partidos. Lo que hemos visto esta semana, del año 2017 hasta ahora no había ocurrido nunca”.
Su relación con Dimitris Giannakopoulos:
“Hay un presidente que es muy hablador y que le gusta hablar, el presidente del Panathinaikos. Además, habla en unos tonos y en unos términos bastante particulares. Habréis constatado que, durante estos años, yo nunca le he respondido en público. Además, tengo que decir que personalmente con él tengo buena relación. Las conversaciones privadas con él han sido siempre muy agradables por las dos direcciones. Más allá de esto, que hace parte de show y de la necesidad de demostrar a sus aficionados que se preocupa por esto, en 22 años no he vivido una situación de conflicto”.
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