Por Eurohoops team / info@eurohoops.net
La racha victoriosa de ocho victorias consecutivas del Real Madrid acabó con la visita del AS Mónaco, que demostró ser un equipo candidato a la Final Four, y se llevó el triunfo en la prórroga por 94-95. Similar al deselance de la última final de la Euroliga, los blancos no tuvieron más oportunidad para ganar el partido que un lanzamiento lejano de Sergio Llull.
Pero a la prórroga no se habría llegado si no fuera por la genialidad de Mike James (28 puntos). Hizo que Edy Tavares picara y se le echara encima cuando el Real Madrid tenía cuatro puntos de ventaja y el partido en el bolsillo. Ese jugada de cuatro puntos dirigió el partido a cinco minutos extra en los que los monegascos fueron mejores.
Dzanan Musa (24 puntos) falló al intentar evitar la prórroga para su equipo, que ganaba 81-73 a falta de cuatro minutos para el final del último cuarto.
El Mónaco consiguió una pequeña ventaja entonces (92-95) y, después de fallar múltiples intentos de igualar el partido, el Madrid no cometió falta sobre ningún jugador del Mónaco para detener el reloj y, tras un intento fallido de James, ni siquiera tuvo tiempo de realizar un buen lanzamiento.
Jordan Loyd anotó 19 puntos para el Mónaco antes de abandonar el partido en camilla en los últimos segundos del tiempo reglamentario tras recibir un codazo accidental de Guerschon Yabusele, que le hizo sangrar. El anotador, sin embargo, no fue esencial para que su equipo logre ponerse por delante de los blancos en la tabla.
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