Por Alex Molina / info@eurohoops.net
El Barça ha sobrevivido a todos los elementos para llevarse el duelo ante el Maccabi Tel Aviv por un apretado 90-92. Partido con cierto aroma a cuarentena por la ausencia de público y en el que un argentino ha sido el factor diferencial.
Con la intención de aprovechar la corta rotación del Barça, el Maccabi presionó a toda pista y subió las líneas de pase. La idea era desgastar al máximo los jugadores azulgranas, pero el daño real lo hicieron castigando a través del dos contra dos y con los cambios que se creaban a partir de ahí. Josh Nebo (13 puntos y 5 rebotes) se puso las botas por dentro y Baldwin (19 puntos y 8 asistencias) desde fuera, aunque el Barça también tenía sus armas. Willy no tardó a empezar a sumar en ataque y pronto se le unieron Lapro (23 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias) y Abrines (16 puntos), referentes ofensivos de un equipo en que todos sumaban en defensa. A pesar de no tener mucha relevancia en ataque, Brizuela, Parra y Paulí aprovecharon la oportunidad que les dio Grimau y fueron imprescindibles para que el Barça llegara al descanso con empate en el marcador.
Un duelo a pecho descubierto era muy probablemente lo que mejor le sentaba a Jabari Parker (10 puntos y 3 rebotes) a la hora de llegar a Belgrado, y el norteamericano no desaprovechó la oportunidad. Junto a James Nnaji, cuya presencia cambia la cara del equipo en defensa, lideró el gran 0-10 de salida tras el descanso para el Barça, que por primera vez en el encuentro mandaba tanto en marcador como en sensaciones gracias al 51-61.
Pero poco tardaron los macabeos a reaccionar. En un visto y no visto, el 59-68 se convirtió en 68-68… con una cosa aún peor que el marcador. Con el empate a 68 llegaron las cuartas faltas personales de Willy Hernangómez (13 puntos y 8 rebotes) y Nnaji (11 puntos y 4 rebotes), los dos únicos cincos del equipo para el partido. Con todo igualado y el partido inmerso en un arbitraje más que cuestionable, solamente la clarividencia e infinitos recursos ofensivos de Lapro mantenían con vida al Barça, que no sabía todavía como parar a Baldwin. Y resultó que el siempre complicado escolta se paró solito. Después de que le pitaran una técnica en la primera mitad por gritar durante un triple del Barça, Baldwin se ganó la segunda técnica después de quejarse (no se sabe muy bien si durante o después) de que Willy había pisado en un tiro libre.
Sin su escudero preferido, Lorenzo Brown asumió más protagonismo y él fue -con la colaboración imprescindible de los árbitros- el que eliminó a Nanji, inventándose una falta que fue la quinta del joven pívot. Poco tardó Willy a acompañarlo en el banquillo, también expulsado, una situación que aprovechó a la perfección Jasiel Rivero (11 puntos y 3 rebotes) para sumar debajo del aro. Aunque el protagonista de hoy no era un cubano, era un argentino. Con 90-91 y tras el enésimo parón del partido, Lapro se sacó de la chistera tres tiros libres… de los que solamente convirtió uno. Los fallos desde la personal permitieron a Lorenzo Brown (12 puntos y 4 asistencias) tener la última pelota, pero su triple para la victoria no entró y ese puntito desde la línea fue suficiente.