Por Eurohoops team / info@eurohoops.net
El choque entre Panathinaikos y Maccabi Tel Aviv no sólo tuvo resultados en la cancha, con el equipo israelí dando la sorpresa en OAKA, sino también después del partido. El primero de todo fueron las explosivas declaraciones de Ergin Ataman sobre su futuro con el Panathinaikos, asegurando que no seguirá si su equipo no llega a la Final Four.
Tal y como hizo su entrenador, que se quejó de la labor arbitral, también el Panathinaikos como club tuvo sus quejas, elevándolas a niveles nunca vistos al hacer insinuaciones políticas.
“Desafortunadamente, una vez más, al llegar al punto más crítico de la temporada en la Euroliga y después de haber hecho un gran esfuerzo como Panathinaikos para volver a los escalones más altos, fuimos testigos de una “cruda operación” sacada de la memoria de las “masacres” que hemos sufrido durante la época de Jordi Bertomeu”, comienza relatando el comunicado.
“No queremos creer que las cosas trágicas que están sucediendo en todo el mundo y que nos entristecen a todos (en Rusia, Ucrania, Palestina e Israel) puedan afectar al baloncesto profesional. Lamentablemente, sin embargo, los errores flagrantes de ayer no nos permiten pensar en otra razón. El campo del deporte nunca debe usarse para curar heridas y situaciones que atraviesan las personas y es un hecho que el baloncesto siempre debe mantenerse alejado de todo esto”, continuó.
“El Panathinaikos ha demostrado, no sólo este año sino también históricamente, cuánto ama el baloncesto y trabaja pensando en el avance del deporte. También ha demostrado que cuando juegan con el sudor de sus atletas, con las emociones de sus millones de aficionados, con el dinero que invierte, y con el enorme esfuerzo que pone, se levanta, da un golpe en la mesa, y lucha hasta el final El Panathinaikos tiene 116 años de historia, quizá más que algunos estados. Por fin mostremos el debido respeto y dejemos de subestimar el producto”