Por George Papageorgiou – Alex Molina / info@eurohoops.net
Una vez más, el Real Madrid tiene el gran privilegio de encarar el futuro con los deberes cumplidos, el trabajo bien hecho y la máxima ambición. Los hombres de Chus Mateo han logrado convertir en costumbre lo más difícil en el mundo del baloncesto: poder tomarse con calma casi todo lo que hacen. El Real Madrid logró terminar primero de la fase regular con mucho margen y jornadas de “descanso”. La entrada a la Final Four también fue relativamente sencilla, viendo como mientras los otros equipos se mataban por meterse también en Berlín, ellos cumplían por la vía rápida ante el Baskonia. Y tras la victoria de ayer ante el Gran Canaria, los blancos pueden centrarse única y exclusivamente en el gran objetivo de la temporada: repetir la Euroliga lograda el año pasado.
Facundo Campazzo encara este desafío de la mejor y más especial de las formas. El base del Real Madrid está en el mejor momento de su carrera y fue nombrado MVP Movistar de la Liga Endesa hace pocos días, un reconocimiento que llega pocos meses después de su retorno a España tras su periplo por los Estados Unidos y Serbia.
El argentino habló con Eurohoops para repasar el momento de forma del equipo justo antes de la Final Four de Berlín, una fase final de la Euroliga en la que lucharán con Olympiacos primero y Fenerbahce o Panathinaikos después para volver a coronarse reyes de Europa, un reto que encara a nivel de MVP… sin querer lucir esa etiqueta.
“No pienso en eso. Los premios individuales se los dejo a los periodistas. Cuando el equipo está bien, cada individualidad mejora y sube de nivel. Eso quiere decir que estoy jugando bien y con confianza, porque el equipo está bien y a un muy buen nivel, con cada uno de los jugadores a un grandísimo nivel. El principal objetivo es tratar de conseguir la Euroliga, después los premios individuales ya se verán”.
El camino hacia la reválida del máximo título europeo requerirá poner fin a la maldición del campeón, aquella que dice que el equipo que termina en la primera posición de la fase regular, nunca termina levantando el título. “Ojalá se rompa este año, vamos a hacer todo lo posible para que esta maldición se termine esta temporada. Obviamente, en una Final Four a un partido es mucho más difícil. De hecho, el año pasado, el Real Madrid hizo algo increíble que fue ganarla después de haber tenido una temporada… más o menos. Creo que al vestirte con esta camiseta del Real Madrid tienes una responsabilidad y una presión, creo que este equipo la lleva muy bien puesta y estamos liderados por jugadores y cuerpo técnico ganador”.
A diferencia de los otros cuartofinalistas, el Real Madrid superó su eliminatoria previa a la Final Four por la vía rápida, un 3-0 al Baskonia que según el argentino, fue todo menos fácil. “Fue difícil jugarle al Baskonia, juega un juego de muchos tiros, ataques y rebotes. Mucha dinámica. Te hacen subir el volumen de tiro, eso hace que haya más posesiones y entonces más concentración a la hora de defender. Para nosotros fue una prueba muy grande”.
Esta es la segunda etapa de Campazzo en el Real Madrid. El argentino ha logrado que su retorno a la casa blanca sea a un nivel incluso superior al mostrado antes de marcharse a la NBA y terminar en Serbia, una vuelta del hijo pródigo que hace aún más especial esta temporada. “Para mí es una temporada muy importante. Vine de la NBA y de seis meses en Estrella Roja tratando de jugar lo mejor que podía… La temporada pasada fue medio rara. Primero en Estados Unidos, al otro mes en Serbia, después estaba en Argentina… Al final, esta temporada se hace especial porque puedo estar tranquilo, en mi casa, con mi familia, con mi mujer e hija ya sabiendo que voy a estar varios años aquí. Ojalá se pueda terminar de la mejor manera. Al final, cuando uno está en su casa bien y tranquilo lo traspasa a su manera de jugar, y eso es lo que se está viendo”.
El Facu también repasó la semifinal ante el Olympiacos, una revancha de la final del año pasado y primer piedra en el camino hasta la duodécima Euroliga.