Por Alex Molina / info@eurohoops.net
Sin ninguna duda, el mejor partido del Barça ha sido hoy. Han tenido que pasar tres jornadas de Euroliga y otras tantas de Liga Endesa, pero los azulgranas parecen haber dado con la tecla de la solidez y han derrotado al AS Mónaco por 86-71.
El partido empezó con una interesante variante táctica de Peñarroya. El técnico azulgrana optó por dar entrada de inicio a Jan Vesely (10 punos y 6 rebotes) y Willy Hernangómez (7 puntos y 5 rebotes), moviendo a Jabari Parker a la posición de alero. La alternativa salió bien ya que los puntos desde la media distancia del checo y la potencia interior del madrileño no tardadon en hacerse notar, aunque el protagonista de la primera mitad fuera otro de los titulares. Todavía no había llegado la primera gran exhibición de Kevin Punter como azulgrana, pero la primera mitad amagó con que llegaba hoy. Sus 13 puntos antes del descanso fueron vitales para que el Barça tuviera ya en la primera mitad dobles dígitos de diferencia (26-16), pero delante había todo un candidato a la Final Four.
Si el Mónaco ha sido capaz de convertirse en una realidad en la mejor liga de Europa ha sido gracias a tener un sinfín de armas ofensivas, un constante carrusel de jugadores peligrosos que los hacen tan temibles como cualquiera a los aspirantes al título. Hay vida más allá de Mike James (11 puntos), mucha más: Okobo (13 puntos y 7 asistencias), el retornado Loyd o el eterno infravalorado Diallo (12 puntos y 6 rebotes) lograron empatar el partido a 32 en el segundo. Peñarroya lo paró y el tiempo muerto fue todo lo que necesitaba el Barça para templar el partido y recuperar la cordura, tarea complicada con un arbitraje entre confuso e irregular, para marcharse a los vestuarios con un interesante 47-39 en el marcador.
La locura arbitral tuvo su punto álgido nada más comenzar el tercer cuarto. Panther y Hordov tenían ganas de calentar el Palau y le dieron a Mike James tres tiros libres fabricados, una de esas acciones en las que todo el mundo, menos los árbitros al parecer, sabían que no estaba tirando desde medio del campo en una transición. Ni el enésimo show de los de naranja -Panther le pitó una técnica a Diallo sin mirarlo, solamente por la reacción del aficionado culé-, pudo evitar las grandes sensaciones azulgranas.
De Panther a Punter
Puede que se pronuncien igual y que ambos hayan sido protagonistas hoy, pero el ‘0’ azulgrana lo fue por buenos motivos. Un frenesí anotador de la nueva estrella del Palau (terminó con 21 puntos, 3 rebotes y 3 asistencias) puso el 55-44 en el marcador que sabía a gloria. El rival a dos dígitos y el Palau encendido. Panorama perfecto para el Barça y dos que ha habían aparecido pero no brillado comenzaron a sumar. Jabari Parker (16 puntos y 5 rebotes) y Nico Laprovittola (13 puntos y 3 asistencias) se aliaron para poner el 67-49 en medio de las dudas de los monegascos, con Mike James metiéndole broncas a todos sus compañeros de equipo.
El 74-54 que colocó en el luminoso Brizuela desde el triple fue la mejor forma posible de iniciar el último cuarto. A pesar de alguna lógica imprecisión por cómo iban las cosas y la enésima prueba de que los árbitros querían salir en la foto como fuera, el Barça logró mantener siempre a raya al Mónaco, logrando una holgada diferencia que podría ser clave de cara futuros escenarios.