Por Javier Molero/ info@eurohoops.net
Derrota del Real Madrid en el Movistar Arena (86-96) ante un Olympiacos acertado desde el triple y con la virtud de sus estrellas. Los de Chus Mateo mostraron personalidad y coraje, pero no fue suficiente. Se termina la racha de seis triunfos seguidos en la Turkish Airlines Euroleague, pero las semanas no pueden ser mejor para cambiar la dinámica.
Evan Fournier, diferencial con 28 puntos y una exhibición en el tercer cuarto con varios triples seguidos. En un duelo igualado hasta la primera mitad, el francés se ocupó de que los de Atenas no sufrieran en los instantes finales. Por algo son uno de los favoritos para el título.
Bartzokas empezó buscando a Fournier con balón constantemente y tiros desde fuera. El Madrid apostó por ir hacia el aro con un Tavares indefendibles en las primeras posesiones (9-3). Vezenkov animó a los suyos, que sufrían con la buena defensa blanca y se asentaron más en el partido.
Inicio de colosos
El ritmo bajó, algo normal entre dos de los mayores colosos de Europa. Y eso favoreció a los de El Pireo, que abusaban del aclarado de Fournier y su infinito talento tras bote. Hezonja levantaba al público con un espectacular tapón sobre Papanikolau y Musa se encargaba de poner la magia para cerrar 19-22 el primer cuarto.
Hezonja y Garuba aportaron músculo, y era necesario con Milutinov y McKissic rompiendo hacia el aro constantemente. Olympiacos se marchaba sin hacer ruido (27-33) castigando en estático, pero el Madrid sacaba carácter en cada ataque. Buenos minutos en defensa de un Hugo González cada vez más asentado en la rotación.
Los de Chus Mateo pasaban por detrás los bloqueos y eso era un grave error. Campazzo y Hezonja, sobresalientes percutiendo constantemente, pero los de Atenas se marchaban 38-47 a vestuarios. El 2/9 desde el triple no ayudaba a los subcampeones de Europa. Y Fournier, con 13 en la primera mitad, asustaba.
El Madrid volvió a encontrar a Tavares, y eso era un soplo de aire fresco. Los de Chus apretaron en líneas de pase y negaron el aro, pero Olympiacos seguía dañando desde el triple. Williams-Goss se destapó ante su ex equipo y Chus tuvo que pararlo urgentemente (44-57). Tavares se iba al banco con cuatro faltas y cuarto y medio por jugar, los problemas no paraban de crecer.
Y apareció Fournier
Con decisiones arbitrales polémicas y varias técnicas para el Real Madrid de por medio, el partido se iba al barro. Hugo González tiró de veteranía inesperada para dar un ritmo más a los suyos y que no se quedasen por el camino. El acierto irreal desde el triple de los griegos eliminaba cualquier intento de remontada. Fournier en estado de gracia ponía el 54-73 casi definitivo antes del último cuarto.
Los continuos fallos desde el triple y el partido estelar del astro francés limitaban las reacciones. Olympiacos, con una plantilla para dominar Europa, sacó el rodillo en el Movistar Arena sin contemplaciones. La segunda unidad de los de Chus Mateo subió la intensidad e incendió a un Movistar Arena volcado con su equipo. Minutos de éxtasis que hicieron creer en la remontada (78-86) con un serio Rathan-Mayes. Pero fue remar para morir en la orilla (86-96). Chus Mateo terminó expulsado con dos técnicas.
Se termina la racha de seis victorias seguidas de un Real Madrid que ha cogido ritmo en Europa y las últimas semanas les ponen compitiendo con los de arriba. Los de Bartzokas, nuevo triunfo para seguir líderes en la competición con un acierto para el recuerdo desde el triple (16/30)
Fournier se fue hasta los 28 puntos en una exhibición en el final del tercer cuarto. Un talento único en el continente, diferencial. Por parte del Madrid, Hezonja (17) y Musa (14) sacaron la cara en ataque. Los de Chus Mateo, 12-10 y sin dejar que el tropiezo baje la moral.