Por Eurohoops team/ info@eurohoops.net
Si hubiera que elegir el aspecto más memorable de la temporada 2003/2004 de la Euroliga, no habría otra que el último espectáculo de Arvydas Sabonis en su canto del cisne.
Tras dejar los Portland Trail Blazers, el gigante de Lituania (en sentido literal y figurado) decidió pasar un año en su amado Zálgiris Kaunas antes de retirarse. A pesar tener 39 años, el legendario Sabas terminó la temporada con un promedio de 16.7 puntos, 10.7 rebotes, 2.4 asistencias y 1.6 tapones por partido.
Esas cifras fueron una barbaridad, sin embargo, la leyenda lituana los alcanzó casi sin esfuerzo. Por supuesto, fue nombrado MVP de la temporada regular y MVP del Top 16, llevando al Zálgiris Kaunas muy cerca de la Final Four. Quién sabe lo que habría ocurrido si no habría sido por uno de los tiros que cambiaron la historia.
A pesar de que ni siquiera un video de 15 minutos con lo más destacado de sus actuaciones puede reflejar la brillantez con la que Arvydas Sabonis lucía en la cancha durante su última temporada como jugador profesional, sin duda podría dar una idea de lo extraordinario que era el desempeño proporcionado por el “milagro de la naturaleza”.