En una batalla entre los dos últimos campeones de Euroliga que literalmente se decidió por los pelos, el CSKA Moscú envió un mensaje que hizo eco en toda la competencia al derrotar a domicilio al Fenerbahce Doğuş Estambul por 81 a 79. Nando De Colo metió una canasta en suspensión in extremis del partido para llevar a los moscovitas a un gran triunfo.