Los cuatro equipos de la Euroliga que nos decepcionaron a todos

No todos los equipos pueden ir a los playoffs. O, para decirlo de otra manera, algunos consideran “reservados” esos puestos para equipos como el CSKA y el Fenerbahce.

Cuando comienza una temporada, al apostar qué equipos llegarán a los playoffs, Barcelona, Maccabi, Armani Milan y Efes podrían estar entre los elegidos en función de sus plantillas, su historia y su dinámica. Sin embargo, los cuatro fallaron y decepcionaron…

El Barça llegó a convertirse en equipo que siempre llegaba a los playoffs, sin importar lo que hiciera. Fue el equipo más consistente, junto a Olympiacos, durante mucho tiempo. Pero ya han pasado dos temporadas desde su última clasificación.

No es casualidad que todo comenzara a ir cuesta abajo después de la marcha de Xavi Pascual. El entrenador catalán había sentado las bases, el sistema y las tácticas para llevar al equipo lo más alto posible y vimos que no era fácil para el equipo ser destetado de esos ocho años que estuvo en el banquillo del Barça. Además, tal vez el hecho de que el Barça haya dependido tanto de Juan Carlos Navarro, quien ha bajado considerablamente sus prestaciones en las últimas dos o tres temporadas, también sea un factor. Eso iba a suceder inevitablemente. ¿No lo deberían haber planeado por adelantado?

Ni Georgios Bartzokas la temporada pasada, ni Sito Alonso esta temporada, pudieron revertir la situación. El Barça fue, una vez más, decepcionante ya que solo consiguieron 11 victorias (dos de ellas, precisamente, contra el Olympiacos). Fueron inconsistentes y carecieron de cohesión. Una vez los veías aplastando a equipos como Olympiacos y Panathinaikos y, la semana siguiente, perdiendo de manera tonta, regalando puntos a diestra y siniestra.

Lo malo de Barcelona es que han hecho una gran inversión. Han malgastado euros sin ningún resultado en Europa.

El título no es un cumplido. En los últimos años, de hecho, después de ganar la Euroliga en 2014, el equipo israelí ha estado vagando sin rumbo. Ahora, termina su tercera temporada sin llegar a los playoffs.

Hasta la Jornada 26 tenían la clasificación en sus manos, pero la remontada baskonista les mostró como un equiop impotente e incapaz de permanecer en la pelea por el billete a los playoffs hasta el final. De hecho, considerando que el Khimki, octavo clasificado, ha finalizado con tres victorias más, podrías llegar a pensar que el Maccabi nunca fue un candidato a los playoffs. Pero eso sería una verdad a medias.

¿No es el resultado lo que cuenta? El Maccabi se quedó fuera de los playoffs por tercera vez consecutiva, por lo que su temporada se considera un fracaso. Cualquier esfuerzo por reforzar el equipo y cambiar la filosofía de la plantilla y el banquillo se desperdició.

Echando un vistazo a la plantilla Milan al comienzo de la temporada, asumiste que serían candidatos a luchar por los playoffs, en los que no han participado desde 2014. Fue el año en el que organizaron la Final Four pero fueron eliminados por el Maccabi, a la postre campeón, pese a tener el factor cancha a favor.

Pues no solo no han llegado a los playoffs, si no que terminaron en penúltimo lugar. Porca miseria…

Ni siquiera el experimentado Simone Pianigiani pudo crear un equipo sólito. Era una plantilla con demasiados anotadores que tuvo altibajos repentinos y era incapaz de marcar la diferencia. En casi ningún momento, a lo largo de la temporada, fueron capaces de parecer una amenaza y, al final, terminaron con diez victorias. Derrotaron al Baskonia dos veces y al Khimki una vez, pero no consiguieron más victorias contra los equipos de los ocho primeros o, siendo precisos, contra los seis primeros. Demostrar lo poco competitivos que fueron esta temporada es así de simple…