Por Alex Madrid / info@eurohoops.net
Las miradas están puestas en Sergio Rodríguez y Luka Doncic, como es lógico. El primero, juega su primera Final Four con una camiseta distinta a la del Real Madrid y lo hace, precisamente, ante su ex equipo. El segundo, dio un paso al frente con la lesión de Sergio Llull. Se echó el equipo a la espalda, lo metió en la Final Four y, ahora, es el principal candidato para tomarle el relevo en el MVP.
Sin embargo, centrarse en este emparejamiento significaría simplificar en exceso un duelo de máximo nivel europeo. Por ello, Eurohoops ha escogido 5 factores a tener en cuenta durante la segunda semifinal de la Euroliga.
1. El peso ofensivo de los grandes
Tras el desastroso primer partido del Real Madrid en Atenas, Pablo Laso quiso dar una especial importancia a los pívots del conjunto blanco. Gustavo Ayón, principalmente, acaparó mucho balón en los ataques del Real Madrid a partir de aquel momento y, el equipo, mejoró notablemente. Felipe Reyes fue otro de los beneficiados por este cambio de sistema, haciendo notoria su presencia en la pintura.
Dos pívots muy físicos, Kyle Hines y Othello Hunter, compartirán minutos en el puesto de ‘5’. Edy Tavares se mostró inseguro contra interiores tan atléticos como los del Panathinaikos -2’8 puntos en playoffs- pero, la diferencia de altura, puede marcar la diferencia si el caboverdiano sabe imponerse.
2. El pánico a ganar del CSKA
Expliquemos mejor este punto poniendo al lector en situación. El CSKA ha llegado a la Final Four en 7 de las últimas 8 ediciones, proclamándose campeón en una ocasión, en 2016. Además, solo fueron capaces de alcanzar otra final, en 2012, en la que un semigancho de Giorgios Printezis les dejó con la miel en los labios, lo que sigfinifica caer en 5 de las últimas 7 semifinales.
De hecho, el Olympiacos, se ha convertido en el principal verdugo del equipo del Ejército Rojo en esta década, que partía como favorito en casi todas las eliminatorias. Esta vez, la historia se repite. El primer clasificado, y preferido en las casas de apuestas, se enfrenta al quinto clasificado de la liga regular.
3. Cory Higgins
Para aquellos que hayan seguido la temporada de la Euroliga con regularidad, les parecerá una obviedad. Para los que no, una explicación. Con un grupo de exteriores formado por Sergio Rodríguez o Nando De Colo, Cory Higgins ha sido capaz de dar un paso al frente convirtiéndose en uno de los mejores ‘3’ de la competición.
Además de no perderse ni un solo partido en la competición, ha sido el segundo máximo anotador del CSKA con 14.2 puntos por partido (promedió 9.5 la temporada pasada). En los playoffs, disfrutó de más minutos de juego tras la lesión de De Colo y, la confianza de Dimos Itoudis la convirtió en puntos (18.8). Además, Higgins cerró la serie ante el Khimki con una canasta clave a falta de 5 segundos.
Por lo tanto, si el equipo de Pablo Laso pretende frenar la anotación del CSKA, deberá prestarle especial atención.
4. Controlar las pérdidas de balón iniciales
El Real Madrid deberá mantener un punto de tensión los 40 minutos, desde el salto inicial. El equipo de Pablo Laso se vio lastrado en la semifinal de la temporada pasada, ante el Fenerbahce, por las pérdidas iniciales. Gracias a las cinco pérdidas cometidas en el primer cuarto (16 en total), los de Zeljko Obradovic consiguieron vencer por dobles dígitos muy pronto y dominaron el encuentro hasta el final.
Un caso muy claro fue, de nuevo, el del primer partido de playoffs. Los madridistas perdieron dos balones en menos de 15 segundos, lo que muestra la baja intensidad inicial. Aquel partido terminó como terminó, aunque los blancos supieron darle la vuelta a la eliminatoria.
¿El caso opuesto? El enfrentamiento entre los dos semifinalistas en el Palacio de los Deportes a principio de temporada. El Real Madrid fue capaz de maximizar los errores del CSKA (17 pérdidas), mientras tuvo el control del balón (8).
5. El “Factor Llull”
El base balear afronta su sexta Final Four con el Real Madrid. Es el jugador de la plantilla que más partidos ha disputado (uno más que Felipe Reyes) pero, Sergio Llull, sigue teniendo una espina clavada. Durante las fases finales disputadas no fue capaz de brillar especialmente en ninguna ocasión… hasta la temporada pasada. Sin embargo, sus 28 puntos se vieron ensombrecidos por la derrota.
Quién sabe si, en la temporada que menos partidos ha disputado, Llull puede marcar la diferencia. No es necesaria otra actuación estelar, como la de Estambul. Quizás, un par de ‘mandarinas’ en el momento justo, podrían ser más que suficientes para cambiar el rumbo de una semifinal.
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