Por Alex Madrid / info@eurohoops.net
BELGRADO – El Real Madrid peleará con Zeljko Obradovic por alzar la Décima. En el camino dejaron al CSKA, primero de la liga regular, al que derrotaron por 92 – 83.
Tras el salto inicial, al Madrid le costó ser fiel a su estilo, el de correr, tirar triples y, sobre todo, divertirse. Entonces, llegó el segundo cuarto, el que cambió el encuentro.
Jaycee Carroll entró a pista haciendo mucho ruido y, en un momento, el partido cambió de rumbo. Gracias a los tres triples del de Wyoming, al alma de Sergio Llull (16 puntos) y al acierto de Trey Thompkins (12 puntos), el marcador se volteó. El primer cuarto terminó 20-30 pero, la segunda unidad, lo convirtió en un 34-32 en poco más de dos minutos.
El soberano tapón que Semen Antonov colocó a Felipe Reyes mediado el tercer cuarto significó la sentencia de muerte. El cordobés se hizo grande en la pintura y, con dos canastas debajo del aro espoleó a lo blancos. El equipo de Pablo Laso comenzó a dominar con claridad el encuentro, enfrió a Nando De Colo (20 puntos con 5/15 TC) y a Sergio Rodríguez (5 puntos) y, la paciencia, hizo el resto.
Un extraordinario Luka Doncic mostró su madurez, midió el tiempo del partido y finalizó con 16 puntos y 7 rebotes. Ahora, su gran prueba: la final de la Euroliga.
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