Por Eurohoops team / info@eurohoops.net
El Real Madrid logró una increíble victoria sobre el Panathinaikos por 73-74 tras remontar los 18 puntos de desventaja con los que terminó el primer cuarto.
La intensidad defensiva que faltó en el primer cuarto apareció en el último y, después de dejar al equipo griego sin anotar durante cuatro minutos, el Madrid se metió de lleno en el partido con un parcial de 0-10. El conjunto dirigido por Rick Pitino, que estaba realizando un partido muy sólido, comenzó a precipitarse. Ni siquiera Nick Calathes encontraba fluidez y acumulaba un fallo tras otro en el triple (1 de 8 desde la larga distancia).
Keith Langford (14 puntos), crecido tras anotar una gran canasta a falta de un minuto, trató de sellar la clasificación matemática del Panathinaikos para los playoffs con un triple. Falló, no tocó ni aro y Pablo Laso pudo preparar la última jugada.
O al menos lo intentó, porque la jugada fue embarullada y acabó en las manos de Rudy Fernández (13 puntos, 5 rebotes) que, sobre la bocina, anotó una de las mejores canastas de su carrera.
“Hay un chico griego que tiene una pequeña tienda justo al lado de nuestro hotel que nos dijo: ‘Parecíais gallinas. ¿No querías ganar o qué?’“. Laso y su equipo parecían haber aprendido la lección tras el famoso parcial inicial de 20-0 en el primer partido del último playoff.
Pero ante el mismo rival y en el mismo escenario el Madrid volvió a cometer los mismo errores. Anclado en la tercera plaza y sin mucho en juego, la falta de intensidad blanca fue el gran aliado del Panathinaikos. Edy Tavares (14 puntos, 16 rebotes), el mejor jugador del choque, anotó los tres primeros puntos del partido pero, a partir de ese momento, se apagaron las luces. Diez puntos consecutivos del equipo griego y una sangría que no se detendría hasta el final del primer cuarto (32-14). El Madrid tendría que remar para acabar con las gallinas.