Por Antonis Stroggylakis/ info@eurohoops.net
Gracias a lo que posiblemente haya sido su mejor desempeño en lo que va de curso, el Olympiacos hizo algo más que simplemente vencer al Real Madrid 99-84. Los rojiblancos superaron la diferencia del partido de la ida y ahora tiene el ‘basket average’, lo que podría ser crucial en esta carrera exhaustiva. El trío de Evangelios Mántzaris (19 puntos, 6/6 triples, 5 rebotes), Vasilis Spanoulis (18 puntos) y Giorgos Príntezis (17 puntos, 8 rebotes) destruyeron al Real Madrid y no sólo mediante su aportación general. Algunos de sus canastas llegaron en momentos clave del partido (como la canasta sobre la bocina de Spanoulis al final de la primera parte y la de Mántzaris en el último segundo del tercer período) que además de la escrita en la ficha del partido también dieron un impulso psicológico a los de Sfairopoulos.
Para el Real Madrid, Sergio Llull y K. C. Rivers ambos terminaron el partido con 17 puntos. A pesar de los 84 puntos anotados, el equipo de Pablo Laso no logró diversificar su juego, teniendo pocas opciones en ataque y encontrando soluciones menos de lo habitual dentro de la pintura. Lo que es más, tras cada intento fallido, los blancos le daban muchas oportunidades al Olympiacos para correr la cancha y meter puntos fáciles. El efecto máximo de esta última tuvo lugar durante el segundo período. El quinteto (Hackett, Johnson-Odom, Strawberry, Papapetrou, Warrick) elegido por el entrenador heleno a principios del cuarto hizo una gran diferencia al mejorar en gran medida la eficiencia defensiva del Olympiacos.
Los rojiblancos negaron muchos puntos al Madrid, mientras que encontraban muchas oportunidades para anotar en el otro extremo de la cancha convirtiendo el 23 – 17 del primer cuarto en 34 – 19. El Real Madrid regresó, pero su rival en seguida endosó un parcial de 13 -2, con Vasilis Spanoulis rematando la fantástica actuación de su equipo en el segundo cuarto con un triplazo sobre la bocina que puso a los griegos por 20 en el marcador (53–33) al final de la primera mitad. Esta ventaja de 20 puntos proporcionó un colchón de seguridad a los locales que les llevó a la victoria. Los esfuerzos de los madridistas resultaron ser inútiles y los muchos rebotes ofensivos (17) recogidos por los de El Pireo perjudicaron aún más su problemática defensa.
Al final, lo único que quedaba a los jugadores de Pablo Laso era intentar por lo menos recortar distancias y salvar el ‘basket average’. Casi llegaron a hacerlo en los últimos minutos, pero el Olympiacos no estaba dispuesto a errar desde la línea de tiros libres, salvaguardando su codiciada ventaja.