Por Eurohoops team/ info@eurohoops.net
Si se tratara de una película, el director sería Stanley Kubrick. Si se tratase de un libro, entonces lo hubiera escrito Dostoievski. Lo que sucedió en Vitoria entre el Laboral Kutxa y el Real Madrid define la perfección. Estamos hablando de un partido que se puede utilizar fácilmente como un tráiler de longitud épica con el título “Eso es la Euroliga”. Un anuncio ideal para todo lo que es santo en el baloncesto bendito y una celebración de todo lo que amamos en el deporte.
Varios vaivenes de liderato a través de jugadas espectaculares, grandes disparos de largo alcance, remontadas sucediendo una a otra. Highlights dignos de un Oscar, pasión y fuerza de voluntad para ganar, mostradas por ambos equipos. Este encuentro lo tenía todo. Aparte de todo lo espectacular arriba mencionado, llego un triplazo en suspensión excepcional sobre la bocina de Davis Bertans para dar al Baskonia la victoria por 89 a 88 y la ventaja de campo tan codiciada. Un final ideal para 40 minutos de brillantez baloncestística de mucha talla.
Giannis Bourousis y Mike James se habían combinado para organizar una remontada de los baskonistas antes del tiro ganador del letón. El pívot griego anotó 25 puntos y capturó 10 rebotes, mientras que el base de los vascos montó un espectáculo desde el perímetro con 6/6 de tres puntos (5/5 en el tercer cuarto) y 27 puntos en total. A manos de ellos, los locales recortaron casi en un abrir y cerrar de ojos la ventaja de dobles dígitos con la que el Real Madrid arrancó la segunda mitad, poniendo las bases para la victoria de su equipo.
Los de Pablo Laso entraron en el partido de una manera bastante dinámica. Los madridistas estaban obviamente listos y decididos a defender su postura, ya que necesitaban la victoria mucho más que sus contrincantes, pero no pudieron silenciar a esas dos ya mencionadas “ametralladoras” del Laboral Kutxa. Pero incluso cuando estaban abajo el marcador, 75 – 69, con dos minutos jugados en el último cuarto, lograron, gracias a los Sergios (Llull – 14 puntos, 5 asistencias, Rodríguez – 18 puntos, 5 asistencias), encestar unos triplazos, para no sólo regresar al partido, sino que recuperar el liderato, poniendo el marcador a 83 – 87 a 90 segundos de la bocina final.
No obstante, el Baskonia tenía la fuerza, la calidad y Bourousis para hacer otra remontada, aunque esta vez no tan grande, y luego a manos mágicas de Davis Bertans atribuirse una valiosa victoria sobre la bocina.