Por Eurohoops team/ info@eurohoops.net
Dos de los grandes del baloncesto griego querían desesperadamente ganar este partido. Pero sólo uno logró salir victorioso cuando sonó la bocina final. Vasilis Spanoulis metió un dificilísimo triplazo sobre la bocina y el Olympiacos ganó la segunda final ante el Panathinaikos (68 – 66), empatando la serie para recuperar el factor cancha.
No fue un buen partido, ya que tanto los verdes como los rojiblancos tenían un porcentaje nefasto de tiros, sobre todo desde atrás del arco, tomando muchas decisiones malas a lo largo de todo el duelo. Con el marcador a 63 – 65 y sólo segundos para el final, Dimitris Diamantidis, que no había acertado en ningún de campo hasta entonces, tomó la pelota y para meter uno de sus clásicos triples en suspensión para darle a su equipo la ventaja de 66 – 65. Pero ese no fue el final…
En la siguiente posesión, Vasilis Spanoulis tomó la responsabilidad de hacer el último tiro significaría un triunfo para el Olympiacos. Con menos de cuatro segundos para el final y chocando con una intensa defensa personal de Nick Calathes, V-Span hizo su propio tiro excepcional desde atrás del arco y así su equipo salió victorioso del OAKA.