Por Eurohoops team/ info@eurohoops.net
Uno de los encuentros más esperados en el Grupo B resultó ser un fiestón de la ÑBA. La selección española entregó su mejor actuación en los Juegos Olímpicos, lo que obligó a Lituania a una humillante derrota por 109 a 59.
Pau Gasol se convirtió en el tercer máximo anotador de la historia del baloncesto olímpico, encestando 23 (con 5/5 triples). Nikola Mirotic añadió 17 y Rudy Fernández 13.
Sólo Mindaugas Kuzminskas (17 puntos) y Mantas Kalnietis (16 puntos) anotaron en dobles dígitos para el combinado báltico.
Ambos equipos mostraron una imagen totalmente diferente en comparación con sus actuaciones en Río hasta el momento. Pero mientras que España ha mejorado su juego de manera significativa, los lituanos, que llegaron a este partido con un balance de 3-0, fueron muy decepcionantes.
De salida, los de Scariolo hicieron bastante claras sus intenciones, dando al público un buen espectáculo baloncestístico, circulando y lanzando el balón de manera excelente, terminando el primer cuarto con una diferencia de 17 puntos – 26 – 19.
Pues, la respuesta de los de Kazlauskas nunca llegó. No es una exageración decir que Lietuva se convirtió en un juguete en las manos de los hispanos. Sin pulso en la defensa e incapaz de ejecutar en ataque, parecía casi impotente.
Francamente, era como si estuviera viendo un grupo de Doppelgänger mal formados de los jugadores que previamente habían castigado a Brasil, Nigeria y Argentina.
Mientras tanto, los españoles no tenían ninguna intención de quitar el pie del acelerador, mostrando buenas conexiones y prácticamente haciendo todo lo que querían en la cancha.
Era natural, dada la manera con la que jugaban ambos equipos, que la diferencia siguiera creciendo, exclusivamente según las ganas y deseos de los españoles.
