Por Eurohoops team/ info@eurohoops.net
En un partido que se olvidará muy rápidamente y que ciertamente no debería decir mucho en favor de la Euroliga, el Maccabi Tel Aviv venció por 60 a 52 a un Unics Kazán plagado de lesiones, para mejorar su balance y ponerlo a 7-13.
El conjunto tártaro lleva el mismo balance que tuvo su segundo resultado de puntuación más bajo en la Euroliga. No es de extrañar que Quino Colom y Artsiom Parakhouski estuvieran de baja, mientras que el máximo anotador de la competición, Keith Langford, encestó 10 puntos menos que su promedio (22 puntos) y con sólo 4/21 desde medio alcance.
Pocos jugadores se destacaron del lado ganador. Andrew Goudelock fue uno de ellos al anotar 17 puntos, mientras que Yogev Ohayon agregó 10. Devin Smith sumó 9 más 6 rebotes.
Orlando Johnson fue máximo anotador del Unics con 13 puntos, y habría terminado con más, si no hubiera sido expulsado a principios del último cuarto con el marcador a 45-42.
Ese fue un momento decisivo, ya que los hebreos endosaron un tirón de 7 – 0 que les dio una ventaja de dobles dígitos: 52 – 42. Con la escuadra rusa privada de soluciones ofensivas, este tipo de ventaja era más que suficiente.
Ambos equipos se desempeñaron mal en la ofensiva, mientras que el Unics tenía algunas excusas menores debido a sus muchas lesiones (y porque Langford no puede llevar una capa de héroe cada noche), el Maccabi volvió a presentar una decepcionante imagen en la cancha. Sin embargo, al descanso, estaba arriba con 9 (33-24).
En lugar de terminar el trabajo en el tercer cuarto, los israelíes perdieron terreno y vieron al Unics convertir el duelo en un partido de una posesión. Pero los invitados no podían contar con una amplia rotación para ser competitivos hasta el final, y el Maccabi asumió un pequeño, pero constante control que lo mantuvo a salvo hasta la bocina final.