Por Alex Molina / info@eurohoops.net
La creación de la Basketball Champions League, la competición europea de clubes organizada por la FIBA, supuso un antes y un después para el Club Baloncesto Canarias, más conocido como Iberostar Tenerife. Tras varias temporadas consecutivas en la parte media de la clasificación, sin muchos problemas para conservar la categoría pero lejos de los puestos de playoff, la participación en la BCL desde su creación le dio las alas necesarias al proyecto para que echara a volar.
La temporada 2016-2017 fue la primera en la que se disputó la Basketball Champions League, y el Tenerife fue uno de los 32 participantes. Esta temporada fue histórica, ya que el equipo consiguió llevarse el título tras ganar en la final disputada en Tenerife al Banvit por 63-59, triunfo que le permitió disputar y ganar la Copa Intercontinental de la FIBA ante el Guaros de Lara venezolano por 76-71, una final que también se jugó en el pabellón de San Cristóbal de la Laguna.
El papel del equipo en la BCL ha sido bastante bueno, ya que al título conseguido en 2017 se le tiene que sumar el subcampeonato de la temporada 2018-2019. Pero el impacto positivo de esta competición va más allá de los resultados conseguidos en ella, y es que la participación en esta competición europea ha supuesto un salto cualitativo en la liga Endesa.
En todas las temporadas en las que el Tenerife ha jugado la BCL, con la excepción de la temporada 2018-2019, en la que quedó en novena posición, el equipo ha conseguido entrar en el playoff por el título, una situación impensable no hace muchos años. El papel del equipo en la competición doméstica fue tan bueno -y regular- que el equipo participó también en todas las Copas del Rey desde la temporada 2016-2017. El Tenerife además fue cabeza de serie en tres de estas cuatro ediciones al ser uno de los primeros 4 clasificados al terminar la primera vuelta, consiguiendo llegar a semifinales en hasta dos ocasiones.
El peor escenario en el mejor momento
La crisis del coronavirus ha llegado en el que probablemente sea el mejor momento del Tenerife en su historia, no tanto a nivel de resultados, que siguen siendo muy buenos, sino por el nivel de la plantilla, la madurez del proyecto y los ambiciosos objetivos que podía conseguir el equipo.
La temporada 2019-2020 del equipo estaba siendo muy buena: fueron cabezas de serie en la Copa del Rey -donde cayeron en cuartos por 85-87 frente Morabanc Andorra-, estaban a una victoria de entrar a los cuartos de final de la Basketball Champions League y ocupaban la cuarta posición en la Liga Endesa, con 14 victorias y 8 derrotas. Además, el equipo se llevó el pasado mes de febrero su segunda Copa Intercontinental de la FIBA, al superar en la final al Bolonia por 72-80.
Txus Vidorreta, el entrenador encargado de ir puliendo este proyecto, siempre ha dejado claro que la Basketball Champions League ha sido vital para el Tenerife: “La Basketball Champions League es muy importante para nosotros. Estamos creciendo haciendo un gran trabajo en esta competición”. Tras una campaña en la BCL también muy buena en esta temporada, siendo uno de los candidatos principales al triunfo, solamente el coronavirus se ha metido en el camino de los aurinegros.