Por Javier Molero/ info@eurohoops.net
El UCAM Murcia se quita la espina en Europa y vence al Peristeri (76-81) en un partido marcado por el buen nivel ofensivo y las claras mejoras con el paso de las semanas, aunque la defensa no fue la mejor en los minutos finales.
Los de Sito Alonso estrenan el casillero de victoria de la Basketball Champions League con Tray Caupain (14 puntos) y Dylan Ennis (11) firmando el papel de líderes. Moussa Diagne dio un susto tras un golpe con el canadiense y la incapacidad de levantarse, pero finalmente está bien.
UCAM comenzó apretando en líneas de pase y saliendo rápido para castigar. En estático buscaban a un Todorovic que se hacía gigante en cada posesión. Caupain y Ennis rompían desde fuera y los de Sito buscaban un ritmo alto que los griegos no podían mantener. Los locales se fueron encontrando y el marcador se cerraba con 22-24 en los primeros minutos.
El segundo cuarto fue más parejo. Hakanson, explosivo por fuera, Birgander haciéndose grande cerca del aro y la ayuda defensiva de un Radebaugh que impulsó a subir la intensidad en canasta propia. El movimiento rápido de balón se convertía en canastas y daba un poco de aire (29-35).
UCAM Murcia sufría para cerrar el rebote, y las segundas opciones para Peristeri se multiplicaban con el paso de los minutos. Es una sensación de comodidad, los de Sito se marchaban por delante a vestuarios (35-42) en una primera parte con buen nivel ofensivo.
Intercambio de golpes en los minutos finales
Dylan Ennis empezaba a lo grande el tercer cuarto y daba una esperanza que resultó ser un espejismo. La dupla de Kurucs y Birgander funcionó durante varias posesiones, y hubo un intercambio de canastas que favorecía a los de Sito. Pero los locales despertaron.
Peristeri buscaba recortar desde el triple, y lo hizo. Con el 47-53 llegaron las dudas en Murcia. El partido se embarró, parones, bajó de ritmo y le vino bien a los helenos. El encuentro se marchaba 55-58 a los minutos finales y la comodidad iba desapareciendo.
En el último cuarto, un Sant-Roos imprescindible quería el balón cuando más quemaba. Un intercambio masivo de triples (cinco seguidos entre ambos), dejaba claro que era un partido abierto. Moussa Diagne dio el susto sangrando en exceso tras un golpe de Ennis y cayó directo al suelo con sensación de mareo. No podía levantarse y volvía a caerse cuando se reponía, pero finalmente le trataron en el banquillo.
Los murcianos controlaron los minutos finales con un colchón suficiente para no pasarlo mal, y Caupain y Ennis se encargaban de llevar a casa (76-81) la primera victoria de esta edición de la Basketball Champions League.