Por Aris Barkas/ barkas@eurohoops.net
MANILA, Filipinas – Para la mayoría era solo un partido de clasificación, pero el choque entre Eslovenia e Italia siempre será recordado y no por el resultado.
Este fue el último partido de la carrera de uno de los grandes del baloncesto italiano. Gigi Datome anunció mucho antes del torneo que el Mundial sería su última experiencia como jugador de baloncesto. No fue la mejor despedida, ya que registró un punto y dos rebotes en poco más de diez minutos, pero recibió una ovación que seguro recordará siempre.
El campeón de la Euroliga de 2016, tres veces campeón de la liga turca y tres veces campeón de la liga italiana, pasando también por la NBA con los Pistons y los Celtics, decidió retirarse a los 35 años y lo hizo jugando contra Luka Doncic.
El partido en sí se jugó a un ritmo algo relajado y el marcador del entretiempo fue 42-41 a favor de Eslovenia con 12 puntos de Doncic. Sin ninguna motivación real para los dos equipos más allá del orgullo. Eslovenia consiguió una ventaja de 49-41 tras un triple de Gregor Hrovat.
Doncic, autor principal de la victoria en el Mall of Asia Arena, anotó un doble-doble de 29 puntos y 10 rebotes y registró su octava asistencia para que Jakob Cebasek anotara el triple decisivo, devolviendo la ventaja de cuatro puntos con 40 segundos restantes en el cuarto periodo.
En el lado perdedor, Marco Spissu produjo 22 puntos, el máximo del equipo, además de cuatro asistencias y tres rebotes. Simone Fontecchio anotó 16 puntos pero con un 6/15 en tiros de campo.
Photo Credit: FIBA.BASKETBALL