Por Dionysis Aravantinos / info@eurohoops.net
PEKÍN – Luis Scola ha liderado a Argentina a una final del Mundial 17 años después y, si hay alguien con autoridad para hablar de la Generación Dorada y de la actual, es precisamente él:
“Hace dos años hice un comentario. Este equipo me recordaba muchísimo a lo que era esa generación en el año 1999, 2000. Mucha gente me miró como si estuviera loco. Hoy, no estoy tan loco. Estamos en el mismo lugar que en 2002″.
Por su veteranía, tiene la obligación de mandar fuera de la pista, ser el líder del vestuario. Sin embargo, siente que aún tiene suficiente calidad para destacar en la pista.
“Lo hago, me gusta, pero reniego de eso”, decía al ser preguntado si debía liderar el cambio generacional. “A mí me gusta jugar, hacer cosas dentro de la cancha. Siento que lo puedo hacer. Me siento incómodo cuando me dicen de lo que puedo aportar en el vestuario, en el banquillo… Algo te puedo decir, pero yo vine para jugar. Tengo conflicto interno. Me gusta jugar y es lo que quiero hacer”.
Foto: FIBA.BASKETBALL