Por John Askounis/ info@eurohoops.net
Además de aclarar que la situación en Grecia no afecta a la Euroliga, Jordi Bertomeu habló de la Federación Griega de Baloncesto y su papel en el conflicto entre Olympiacos y Panathinaikos durante su reunión con la prensa el domingo. El Presidente y Director Ejecutivo de la Euroleague Basketball compartió su opinión sobre por qué las situaciones similares entre las dos potencias griegas no ocurren en la Euroliga.
“El conflicto entre Olympiacos y Panathinaikos es de interés local, pero no somos indiferentes y neutrales. Estoy decepcionado y siento que es una pena para el baloncesto que la Federación Griega de Baloncesto, que durante años preparó el camino para el funcionamiento de las ligas, no haya logrado encontrar una solución. En tales casos, se necesitan movimientos directos, no conductas pasivas que demuestren la incapacidad de intervenir de manera efectiva y encontrar una solución. Olympiacos y Panathinaikos tienen una rivalidad, que no debería ir más allá del baloncesto. Su coexistencia en la Euroliga no ha creado problemas, porque ambas partes entienden el medio ambiente y respetan las reglas. Lo que sucede a nivel nacional es impensable. Me pregunto si alguien tiene algo que ganar si Olympiacos desciende”.
El presidente de la Federación Griega de Baloncesto, Giorgos Vasilakopoulos, no reaccionó con amabilidad a lo anterior. Respondió con una declaración publicada a través del sitio oficial de la Federación Griega.
“La persona que durante muchos años ha ignorado y subestimado de manera visible y demostrativa a las Federaciones Nacionales con sus acciones en busca de su eliminación, recordó repentinamente que justificaba los problemas internos de una liga. La persona que a través de sus acciones y prácticas dividió y planteó una amenaza peligrosa para el baloncesto europeo tiene la audacia de hablar sobre las intervenciones y encontrar soluciones. La persona que sin vergüenza apuntó a los equipos nacionales y las ligas domésticas buscando con sus compañeros la forma para degradar al primero y reducir al punto de extinción al segundo, se atreve a instigar a otros. La persona que crea dilemas inmorales para los jugadores que quieren unirse a sus equipos nacionales al poner partidos el mismo día, habla sobre la extorsión y la falta de libertad. Sr. Bertomeu, desafortunadamente para usted, todos nos conocemos. El silencio es mejor que las palabras.”