Antonis Stroggylakis / AStroggylakis@eurohoops.net
Momentos después de llevar al CSKA de Moscú a su novena Final Four de la Euroliga consecutiva -la sexta desde que se hizo cargo en el banquillo en 2014-, Dimitris Itoudis entró en el vestuario e hizo el gesto a sus jugadores que les caracterizó durante los playoffs contra el Fenerbahce: se metió los dedos índices en la boca, como si fueran cuchillos.
“A veces las pequeñas cosas dan grandes resultados“, dijo Itoudis a Eurohoops, en una entrevista con motivo de la clasificación para la Final Four. “Me salió de dentro. Los jugadores se abrazaron y les gustó, así que eso es lo más importante. Y lo convirtieron en un lema“.
Caló en sus jugadores, ya que Will Clyburn, que acaba de batir su récord de anotación en el 3er partido, también hizo el gesto cuando entró al vestuario.
El técnico griego suma seis Final Four consecutivas. Es algo que ningún otro entrenador había logrado antes en la historia de Copa de Europa. Y estamos hablando de “todos los tiempos” aquí, no solo de épocas específicas o distintos formatos.
Pero no fue este el motivo por el que celebraron de manera especial el pase. La manera en la que se desarrolló la temporada, las lesiones y, por supuesto, la salida de Mike James.
Eurohoops: ¿Es cosa mía o esta clasificación del CSKA a la Final Four se celebró más que otras?
Dimitris Itoudis: Ahora que me recuerdas un poco las clasificaciones que logramos… Yo diría que también la de 2019 ante el Baskonia, cuando tuvimos que superar el hecho de que empataron la serie en el 2º partido y sacaron la ventaja de campo para llevarlo a Vitoria. Ya sabes lo difícil que es jugar contra el Baskonia con su pabellón lleno. Tuvimos que ir allí y demostrar carácter.
¿Sabes cuál es el hecho importante? Fue muy celebrado. Lo más importante y lo que une a las personas es cuando te ayudas en las dificultades. Tuvimos muchas adversidades y superamos muchos obstáculos. Definitivamente, todos y cada uno de los que presenciaron esto, desde el presidente hasta el personal, recordarán con cariño estos recuerdos por las adversidades que tuvimos que superar y porque compartimos los problemas. Aquí es cuando la gente se acerca, cuando la gente se une más. Cuando miran al lado izquierdo y miran al lado derecho, saben que tienen la espalda cubierta y van a pelear sin importar qué y dar lo mejor de sí mismos.
Así que sí. Entre todos los recuerdos que tuvimos, fue uno de los mejores.
EH: Habla del grupo y la hermandad que tenéis en el CSKA …
D.I.: Si soy un poco científico y dado que me lo enseñaron profesores: es cuando el cuerpo produce oxitocina, es el hecho de que la gente se está uniendo. Hermandad es una gran palabra. Ya sabes, “voy a ayudar, voy a levantar a mi compañero del suelo, levantarlo y salir a pelear juntos”. El equipo es lo primero, y eso es más o menos lo que hay.
EH: Y así es como se crean los equipos ganadores. Ahora, cuando entrarse al vestuario después del 3er partido, hiciste el gesto del “cuchillo en la boca”. Will Clyburn también lo repitió. Parece que se ha convertido en algo importante…
D.I.: A veces las pequeñas cosas dan grandes resultados. Eso me salió de dentro. Cuando los griegos salimos a pelear, intentamos motivar a la gente y dices que tienes que estar tan listo, tan listo que vas a la batalla como los guerreros van con un cuchillo en la boca.
Así es como entramos en el 1er partido. Y cuando lo ganamos, dijimos que íbamos a tener dos cuchillos. Los jugadores se abrazaron y les gustó, así que eso es lo más importante. Y lo convirtieron en un lema. Estoy muy orgulloso y al mismo tiempo es un poco divertido…
“Pero, a veces, por una cosa tonta que podrías pensar que has dicho, los jugadores pueden hacerlo suyo y realmente motivarse. Y eso es lo mas importante”
Y estoy orgulloso de este grupo de personas que realmente están luchando, manteniéndose unidas a pesar de las adversidades, a pesar de los problemas, las lesiones que tuvimos. Se unieron en el momento más importante de la temporada, cuando importaba, y se clasificaron para la Final Four. Ellos son los que merecen todas las felicitaciones.
EH: Has hablado de adversidades. Esta es una palabra que has usado varias veces durante la temporada. Por problemas de coronavirus, por lesiones, por todo tipo de dificultades por las que pasó el CSKA antes de llegar a la Final Four. ¿Fue esta la temporada que te ha supuesto un mayor reto como entrenador?
D.I.: Fue una de llas. La razón por la que digo con humildad es la siguiente: lo que trato de decirles a mis ayudantes y a mis jugadores es que en la vida no se concede nada. Podrías sentarte, con todo el respeto, y decir ‘OK, el CSKA es el favorito hoy, este año irán a la Final Four, este año irán hasta el final’. El respeto está bien. Pero para nosotros, que estamos viviendo la rutina diaria y sabemos las cosas a las que nos enfrentamos a diario, nada está garantizado.
Tiene las competición más grande, con 17 equipos que te persiguen. Especialmente cuando eres un campeón, los dedos te apuntan. Todo el mundo te está observando. Todo el mundo está intentando dar lo mejor de sí mismo porque juegas contra los campeones. Así que somos los actuales campeones y aunque prácticamente tenemos un equipo diferente al de 2019.
Sabéis que los equipos no se construyen durante la noche. Necesitas crear la química adecuada. Necesita tiempo. Se necesitan adversidades. Se necesitan algunos golpes. Tuvimos que superar muchas cosas. El hecho de que elijamos el camino difícil le da un reconocimiento extra a mis jugadores.
“Cuando te enfrentas a adversidades u obstáculos tienes dos caminos: uno probablemente es levantar la mano y decir ‘lo intenté todo. Lo intenté todo y no funcionó’. Empiezas a llorar y dices ‘lo intenté y no pude. Llegó este problema, vino esto y vino aquello’. El otro camino, que eligieron mis jugadores, todo mi staff y todo el club, es el difícil. Dices ‘no, vamos a luchar contra esto. Vamos a pasar por eso. Vamos a verlo, a trabajar y pasar por eso’.
Porque, al final, compras el billete al éxito con el que nunca soñaste“
Fue difícil y es por eso que creo profundamente en ello, que merecen todo el reconocimiento. En el momento que importa, los jugadores y los líderes que significan mucho para este club se uniron y se formó un equipo. Eso es lo más importante.
EH: Luego llegaron los playoffs. La serie entre el CSKA de Moscú y el Fenerbahce era considerada por muchos como la más abierta… antes de los problemas de coronavirus de los turcos.
El Fener tenía sus problemas, el CSKA tenía sus problemas. Y, al final, fue una pena que no viéramos a estos equipos luchando con toda su fuerza. Personalmente, lo que más eché en falta fue la “batalla de los banquillos” frente a Igor Kokoskov.
D.I.: Con todo el respeto a su pregunta, creo que los entrenadores son muy importantes en el baloncesto. Tenemos mucha participación en el juego.
“Le mandé un mensaje a Igor porque es mi amigo y uno de los mejores en lo suyo. Definitivamente, es uno de los mejores entrenadores. Estoy orgulloso de tener un amigo que ha sido el primer entrenador principal europeo en la NBA después de tantos años en Estados Unidos. Estoy muy orgulloso de él. Todos estamos muy orgullosos. Le envié un mensaje y le dije: ‘Lo siento’. Él me mandó un mensaje en agosto cuando tuve el virus. Fue mala suerte para él tenerlo ahora. Yo lo pasé al comienzo de la temporada, él lo pasó ahora. Nunca sabes. Esa es la incertidumbre a la que nos enfrentamos.
Le dije que lo sentía, le dije que su sitio eran los playoffs. Pero teníamos que salir y enfrentarnos a nuestros propios problemas también“.
Felicito también a su asistente que se hizo cargo (Erdem Can) del equipo, que no fue fácil para él tampoco. El Fener tenía a sus principales creadores, Nando [De Colo] y [Marko] Guduric y [Lorenzo] Brown. Ellos les mantuvieron unidos ante la ausencia de [Jan] Vesely y [Jarell] Eddie.
E.H: Nando os dio muchos problemas en el 1er partido. Esa imagen en la que tres jugadores del CSKA se centran en defender a Nando es mítica.
D.I.: En un momento determinado anotó mucho, nos hizo pasar un mal rato. Salió fuerte en el primer cuarto y luego Guduric, en el 2º partido, anotó 22 puntos en la primera mitad. Pero estos son los chicos que realmente lo dan todo en estos partidos. Nando tiene una tremenda experiencia jugando a este tipo de encuentros.
No puedes estar tan relajado. Nos habíamos preparado, pero no funcionó. Intentamos contenerlos y lo hicimos en la segunda mitad. Era obvio que también cambiamos de actitud en la segunda parte, defensivamente, y lo superamos.
Volviendo a lo que estábas diciendo, es una pena que no hayamos visto a ambos equipos con toda su fuerza. Echamos de menos a Nikola [Milutinov], al que fichamos por su capacidad de lograr dobles-dobles. Pero, como dije, tuvimos que elegir el único camino que quedaba y ese camino era la lucha. Y seguimos luchando y creyendo.
E.H.: Y luego terminasteis barriendo al Fenerbahce tras la paliza del 3er partido. Will Clyburn jugó su mejor partido en la Euroliga, aunque sabemos lo que puede hacer. Al fin y al cabo es MVP de la Final Four. Me gustaría que me dijeras algo sobre Iffe Lundberg, quien dio un gran paso adelante. Sabíamos de su calidad, pero no de su rendimiento en este tipo de partidos.?
D.I.:Antes de hablar de Iffe, permíteme volver a destacar a los jugadores. Daniel Hackett estuvo enorme en la serie. Ivan Ukhov nos dio grandes momentos. Semen Antonov también nos dio grandes momentos y Johannes Voigtmann junto a él. Toko [Shengelia] siempre estuvo defendido por dos jugados… estaba más que claro que la táctica del Fenerbahce era que no querían perder con la creación o ejecución de Toko en el poste bajo. Así que tienes que encontrar una solución e intentar tener más espacio en la creación.
Estoy empezando a ayudar a estos muchachos y el significado del equipo es ese: que todos y cada uno entendieran que su rol será diferente.
Will Clyburn… bueno, ya los has dicho, cuando está sano es el jugador que es. Es un jugador franquicia y estoy muy contento por él. Todos en el club están contentos por tener la suerte de trabajar junto a un competidor y un líder así. Lidera con el ejemplo, como también Toko Shengelia. Como también Nikita Kurbanov. Van a dar lo mejor de sí mismos en entrenaminetos y partidos. Realmente son todos grandes competidores.
Pero Iffe está llegando a ese entorno. En este tiempo que hemos pasado juntos, de hecho desde la primera llamada telefónica, trato de explicarse cómo se vería, porque aprendemos unos de otros.
Iffe está repleto de confianza en sí mismo. “Soy un trabajador y tengo muchas expectativas de mí mismo”, me dijo. Y le contesté que necesita establecer un buen status quo entre sus compañeros de equipo porque está llegando a un equipo ganador. Con todo el respeto a Zielona Gora, este es un paso diferente en su carrera.
Pero estaba dispuesto a aceptarlo porque era algo tenía dentro. En su primer partido contra el Olympiacos en El Pireo tuvo mucha confianza. Estaba haciendo su trabajo, sintiéndose cómodo. Jugará como escolta en algunas ocasiones, pero en mi sistema el escolta puede convertirse en un creador secundario y un ejecutor. Es fácil decirlo ahora, pero lo difícil será hacerlo realidad.
Su depóstito está lleno. Tiene muchas cosas para ofrecer. Mucho desarrollo por delante. Hay algunas cosas que mejorar para ser un defensor más consistente, reboteador o cuando lee el juego. Pero ya que estamos hablando de Iffe… Seguramente, su hijo le hizo pasar por momentos difíciles hace poco con la gripe. Pero él no es el tipo de jugador que se perdería los entrenamientos. Es un tipo que quiere aprovechar cada momento que está viviendo y está muy agradecido de estar en ese entorno, el vestuario y llevar la camiseta del CSKA.