Por Bojan Brezovac / info@eurohoops.net
Tras pasar por todas las categorías del KK Zagreb, Krunoslav Simon inició su carrera en el extranjero pasando por España, Rusia, Italia y, finalmente, Turquía. Pocos podían imaginar -y menos él mismo- que se convertiría en una auténtica leyenda, corazón y alma del Anadolu Efes. El dos veces campeón de Europa tendrá ahora su dorsal número 44 retirado para siempre.
Simon llegó a Estambul en 2017 y, desde entonces, ha sumado a su palmarés dos títulos de Euroliga, 2021 y 2022; en 2019 y 2021, ayudó a su equipo a conquistar el título de campeón de la liga y también fue campeón de un par de Copas de Turquía en 2018 y 2022, y un par de Supercopas en 2018 y 2019.
La ceremonia de retirada será el próximo 1 de diciembre, antes del enfrentamiento entre el Efes y el Olympiacos en Euroliga. Simon estará en los asientos de primera fila, viendo a sus ex compañeros luchar por una nueva victoria. Llegará al pabellón como aficionado, pero saldrá como una leyenda del club (oficialmente).
“Sabía desde hace tiempo que el Efes retiraría mi camiseta, pero cuando llegó la notificación oficial, no podía creerlo de nuevo. Es un eufemismo decir que me siento honrado. Pasé bonitos años en Estambul, hice amigos y sólo puedo estar eternamente agradecido al club“, dijo Krunoslav Simon en una entrevista con Eurohoops.
Simon se convertirá así en el segundo jugador de baloncesto al que el Efes concederá tal honor, ya que también cuelga del techo del Sinan Erdem la camiseta del exinternacional macedonio Petar Naumoski, que pasó seis años en dos etapas como miembro del club turco más laureado conquistando cuatro ligas y cinco copas en Turquía, además de la Copa Korac.
“No puedo ponerme en primer lugar. Han pasado muchos chicos por el equipo, el baloncesto es un deporte de equipo pero, para ser sinceros, teníamos a Shane Larkin y Vasilije Micic, dos tipos que han dominado durante años y cuyas camisetas serán retiradas con total seguridad. Ahora es la mía porque fui el primero en salir, pero esos dos chicos son algo especial. Me alegro de haber sido su compañero y de haber podido ayudar al equipo. He disfrutado jugando al baloncesto“.
Si excluimos Zagreb al principio de su carrera, no se ha quedado en ningún sitio tanto tiemo como en Estambul. Cinco años completos: “Por supuesto, esos dos títulos de campeón de Europa estarán siempre grabados en mi memoria pero, para mí, personalmente, destacan dos momentos diferentes“.
Estos dos detalles ilustran el tipo de compañero y de persona que es Kruno: “El primer momento es la derrota contra el CSKA en 2019, cuando jugamos la primera final. Nunca olvidaré las caras de mis compañeros en el vestuario. Lo dieron literalmente todo, el último átomo de fuerza. Vi que era cuestión de tiempo que nos convirtiéramos en campeones de Europa. Y el segundo momento, que fue muy emotivo, fue cuando Vasilije Micic recibió el premio de MVP“.
“Yo estaba allí cuando Vasilije Micic llegó, puedo decirlo libremente, por la puerta de atrás al club, y luego consiguió convertirse en el mejor director de juego de Europa, ganando premios, trayendo trofeos. Un gran tipo. Recuerdo ese momento tan emotivo, cuando recibió el premio de MVP, me alegré mucho por él y me invadieron las emociones, como si yo hubiera ganado el premio. Así me sentí“, explica el croata.
Terminó su etapa en el Efes de la mejor manera posible: con el título de campeón de Europa. Se despidió del club, pero no del baloncesto: “Ahora estoy jugando en el Cedevita junior, pero el verdadero debut está por llegar. Me rompí la mano, estuve en rehabilitación, así que todavía no he jugado de verdad. Sigo amando el baloncesto y quiero estar en la cancha“, confiesa, antes de mandar un último mensaje.
“Le debo mucho al baloncesto, sigo jugando sólo por amor. Si no fuera por el baloncesto, nunca podría representar a mi país en los Juegos Olímpicos, viajar por el mundo o ganar títulos. El baloncesto es un deporte maravilloso y, mientras sienta amor y pasión por él, jugaré“.
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