Por Aris Barkas/ barkas@eurohoops.net
En una más que interesante entrevista con el diario “El Mundo Deportivo” y José Ignacio Huguet, el secretario general de la FIBA, Patrik Baumann, habló de las intenciones de la FIBA en cuanto a la Euroliga y el baloncesto europeo en general.
La conclusión de la entrevista es que la FIBA no cambiará su nuevo calendario para los equipos nacionales y el plan de hacer el FIBA Mundobasket la principal competencia de baloncesto, con las bendiciones de la NBA. Baumann no admitió abiertamente que la NBA podría ser un socio en cualquier calidad en una “nueva” la Euroliga bajo control de la FIBA - algo que se decía por un tiempo – pero es obvio que la NBA tiene un papel que desempeñar.
Como ha dicho Baumann: “En los últimos quince años hemos tenido problemas, hemos tenido fracasos y pocos recursos. Hoy estamos en otra situación, estamos fuertes, tenemos recursos, tenemos unas ideas muy claras. Ahora tenemos que multiplicar nuestros esfuerzos en el mercado. Queremos ser el deporte número uno en el mundo. Compartimos esta visión con la NBA, que ahora está presente en nuestro consejo y trabaja con nosotros. Creemos que tenemos una oportunidad increíble”.
Entonces, ¿Qué es lo que la FIBA podría hacer mejor? “Ya estamos cansados después de quince años. La FIBA está aquí para crecer el baloncesto, para administrar una liga europea y los clubes. Estamos listos, hemos invertido dinero y todo se acabó con tonterías como tener reglas diferentes. La NBA podría ayudarnos a llegar a ser mejor que la Premier League inglesa”. Según Baumann: “La liga china tiene un patrocinador que paga 65 millones de dólares cada año. Ahora comparen eso con lo que hacemos aquí en Europa”.
No obstante, Baumann ha evitado un ataque directo contra la Euroliga: “Estoy muy motivado ya que las federaciones nos apoyan y también los presidentes de muchos clubes. Estamos motivados, queremos invertir y no tenemos ningún deseo de hacer algo más. Como FIBA no queremos administrar una liga nacional o continental y hay personas que les va bien en el otro lado del Atlántico. Y también en Barcelona.”