Por Panos Katsiroubas/ info@eurohoops.net
La lupa se enfoca en todas las canchas europeas de la Turkish Airlines Euroliga y cada semana elige algunos de los partidos que roban el espectáculo en la máxima competición europea
La defensa da la victoria en un partido de rocanrol
¡Vaya partidazo en Vitoria! Literalmente un rocanrol en que ambos equipos se dejaron la piel en la pista, con el Laboral Kutxa Vitoria Gasteiz, gracias a su increíble defensa, imponiéndose por 81 a 71 al CSKA de Moscú. Los vitorianos lograron parar al equipo de Dimitris Itoudis a 71 puntos, cuando antes de este partido habían promediado casi 93. No es casualidad que el Laboral tenga la segunda mejor defensa de la Euroliga en términos de puntos concedidos por posesión. Debido a que el Laboral juega a un baloncesto de alto ritmo, sin embargo, esto no siempre se refleja en la estadística. Desde el principio los locales hicieron claras sus intenciones y, esencialmente en el primer cuarto, desmantelaron por completo el sistema ofensivo del CSKA. Sus 10 puntos son la peor actuación ofensiva del equipo de Itoudis en lo que va de temporada. En el segundo cuarto el CSKA volvió al partido a través de su defensa, con Kyle Hines haciendo un gran trabajo en los cambios, pero al igual que él sus compañeros bloquearon los pasillos hacia su canasta.
Sólo Darius Adams era eficaz para el Baskonia las pocas veces que encontraba unos pasillos abiertos. En la segunda mitad el partido se hizo aún más difícil. La defensa del Laboral sobre Milos Teodosic fue increíble. Principalmente Fabien Causeur, pero también los hombres altos en los cambios, tenían levantadas sus manos todo el tiempo por lo que la estrella serbia no podía encontrar el tiempo o el espacio para ejecutar. Consiguió encontrar algunos pasillos y finalizar algunas jugadas por medio de penetraciones, pero en general nunca encontró el ritmo que había tenido en los partidos anteriores. Muchas veces se vio obligado a ir a la línea de fondo simplemente para tirar la pelota a fin de que no saliese de la cancha. Terminó el partido con 18 puntos y 5/13 tiros, mientras que tenía 7 asistencias y también 3 pérdidas del balón. En cuanto al Laboral, además de su buena defensa, vio sus líderes en un buen día, circulando bien la bola lo que les permitió castigar cada flaqueza defensiva de su rival.
Causeur y Ioannis Bourousis hicieron un gran trabajo en la parte ofensiva. El pívot griego reencontró su forma sumando 19 puntos y 13 rebotes. Anotó mucho desde el poste mientras que tenía la mente clara para pasar la pelota a sus compañeros abiertos cada vez que la defensa del CSKA enviaba ayudas contra él. Causeur, capitán baskonista, fue excelente en una actuación absoluta tanto en defensa como en ataque, aportando en cada aspecto. Adam Hanga y Tornike Shengelia también hicieron un gran trabajo, sobre todo en la defensa. El CSKA tenía muchas segundas opciones gracias al rebote ofensivo, pero no tenía acierto en su tiro exterior con sólo 6/26 triples. El equipo local metió 10 de 23 lo que seguramente jugó su papel decisivo.
Justin Doellman deja K.O. al Madrid
En Madrid presenciamos otro clásico increíble que se convirtió en una película de suspense. Y esa película de suspense la ganó el equipo que tuvo el ímpetu de volver al partido en aquel momento particular, en este caso el FC Barcelona de Lassa, que remontó una desventaja de 16 puntos y ganó el partido con un buzzer-beater de Doellman que en general y con consistencia, fue el mejor jugador de los visitantes. El partido se basó puramente en el ritmo. Mientras el ritmo era alto y el partido se abrió en términos de posesiones, el Real Madrid lo dominaba. Cuando el ritmo bajó, las había menos posesiones y el duelo se limitó a cinco contra cinco, que fue cuando el Barcelona regresó al partido. Doellman arrancó enchufadísimo el partido metiendo tiros tras pantallas en la bola o tras hacer circular bien el balón, anotando 8 de los primeros 10 puntos de su equipo. La entrada de Sergio Rodríguez y Sergio Llull cambió por completo la imagen del partido.
“El Chacho”, sobre todo, jugó como si hubiera estado poseído. Nadie pudo contenerlo individualmente, mientras que al mismo tiempo hizo muchas canastas para sus compañeros. Terminó el partido con 18 puntos y 13 asistencias y fue el principal motivo del tirón de 18-0 que convirtió el inicial 2-10 en 20-10. Llull llegó desde el banquillo y metió 3 triples. La defensa de los blancos sobre Ante Tomic fue excelente, mientras que también consiguieron excelentes paradas defensivas por parte de KC Rivers y Jeffery Taylor a lo largo del perímetro. La desventaja subió a 16 puntos para el equipo visitante (48-32) y nadie podía imaginar lo que pasara en la segunda mitad. Fue entonces cuando el Barcelona, a base de su buena defensa y un increíble desempeño de Stratos Perperoglou que anotó 13 puntos, todos en el tercer cuarto, dio la vuelta al partido y lo hizo un derbi. Por supuesto, habría que mencionar las magníficas actuaciones de Pau Ribas y Tomas Satoransky.
Los dos jugaron un gran defensa en el exterior haciendo muy difícil la circulación del balón por parte de los madridistas, mientras que también pararon la transición del Madrid. Además, hicieron un trabajo increíble en ataque penetrando en la defensa de los blancos y repartiendo el balón hacia las alas para unos tiros abiertos ya que también fueron los autores exclusivos de la circulación pelota increíble que los visitantes tenían en la segunda mitad. A pesar de anotar sólo 11 puntos, dieron los 14 de 23 asistencias del Barcelona. La defensa del Madrid siempre cortaba dentro de la pintura con los jugadores de las alas ofreciendo ayuda, pero al mismo tiempo dejando a los jugadores del Barcelona en las esquinas para unos tiros abiertos tanto desde el lado débil como desde el fuerte siendo castigada a manos de Doellman y Perperoglou que acertaron en 9/12 triples.
Shane Lawal hizo su mejor actuación del curso tanto en defensa como en ataque compensando la noche bastante mediocre de Tomic. Al final, Pablo Laso y Xavier Pascual añadieron sus retoques de coaching. Ninguno de los dos confió en la defensa de su equipo, haciendo faltas y pidiendo el balón a la ofensiva al final. Un tiro libre errado por Felipe Reyes obligó al Madrid defenderse, Doellman se quedó con Gustavo Ayón tras los cambios, hizo un rápido movimiento de parar y saltar para desmarcarse dándole a su equipo la victoria. Una victoria muy importante que mantiene al Barcelona cerca de los favoritos del Grupo F.