Por Panos Katsiroumpas/ info@eurohoops.net
El Barcelona ha realizado un gran fichaje en su intento de inyectar atletismo y energía a su plantilla de cara a la nueva temporada. Entre ellas, el internacional español Víctor Claver.
Claver es el primer movimiento hecho por el equipo de Georgios Bartzokas con el fin de darle energía a los catalanes, algo que le ha faltado mucho los últimos años. A pesar de su calidad, los blaugrana han sido un equipo suave que casi nunca pudo responder a la hora de la verdad.
Puede que el valenciano no fuera la máxima estrella durante el camino del Lokomotiv Kuban hacia Berlín, pero resultó ser una herramienta importante que pudo proporcionar soluciones de muchas formas, facilitándoles el trabajo a sus compañeros de equipo.
Su perfil
Claver impresionó a mucha gente desde una edad muy temprana, ya que a sus 18 años fue proclamada una de las nuevas promesas del baloncesto español. A pesar de esto, sobre todo debido a la forma en que jugó, nunca se convirtió en una gran estrella, al menos en cuanto a sus números, por el contrario, se convirtió en un jugador de rol muy útil que puede aportar en muchos aspectos del juego.
Jugó en el Valencia desde 2006 hasta 2012, apareciendo en todos los grandes torneos europeos, llegando a ser internacional desde una edad temprana, ganando tres medallas de oro en el EuroBasket. En 2012 dio el salto a la NBA y los Blazers. En su primer año allí hizo una buena temporada, pero en los siguientes dos años tenía muy pocos minutos de juego. El año pasado estaba cerca de firmar con el Baskonia, pero al final firmó con el Lokomotiv Kuban, una elección acertada, teniendo en cuenta el temporadón que hizo con el equipo de Krasnodar.
Su posible aportación
El alero/ala-pívot español no es lo que llamaríamos una estrella o el jugador que va a llevar la batuta. Pero es un jugador que puede aportar en muchas partes importantes del juego, como la anotación o el rebote, también haciendo el trabajo sucio. Su gran ventaja es su atletismo, algo que afecta a su juego en varias facetas. Es excelente en transición, mientras que es un reboteador dotado, capturando rebounds en defensa, pero sobre todo en ataque. Juega tanto de alero como de ala-pívot, pasando la mayor parte del tiempo jugando de “4”. A partir de ahí, puede abrir la cancha, ya que tiene una bastante buena capacidad tiradora. No es el tipo de jugador que prefiere poner jugadas individuales, sino que intenta atacar a través de colaboraciones equipo. Llena muy bien los huecos en defensa y tiene muy buenas finalizaciones, sobre todo gracias a su capacidad atlética.
No ha mejorado su habilidad de atacar el balón en el suelo, pero enfrentándose a unos rivales más lentos trata de castigar gracias a su velocidad, intentando anotar.
En defensa, es una gran herramienta con muy pocos puntos débiles. Es muy bueno en defensa de uno contra uno, ofrece ayuda rápida y en el momento adecuado, es excelente en defensas de ajuste al par, mientras que también es un buen protector de aros, cuando sus rivales encuentran pasillos hacia la canasta. Un punto débil es la defensa en el poste cuando juega de “4”, algo que se debe al hecho de que tiene un cuerpo bastante ligero para esta posición.
En cualquier caso, la forma en que puede su talento puede ayudar al Barcelona es multidimensional, con los aspectos positivos de este fichaje siendo muchísimos. Puede que no se convirtiera en un astro baloncestístico, según las predicciones, pero en manos del entrenador Bartzokas lo cierto es que va a ser más que útil, con su aportación y talento estando constantemente expuestos durante toda la temporada.