By Panos Katsiroumpas/ info@eurohoops.net
En ésta edición de la lupa se analizan los paridos de la cuarta jornada entre el Real Madrid y el Panathinaikos y entre el Nizhny Nóvgorod y el Efes. También la lupa se centrará en los puntos clave que marcaron la diferencia y decidieron los demás seis partidos. En este apartado vamos a analizar la épica victoria del Nizhny contra el Efes.
¡UN RECITAL INCREÍBLE!
¡Para los que siguen de cerca la Euroliga fue un verdadero choque! La robusta defensa del Efes de Duda con mucha presión en el balón, la velocidad en revoluciones y el atletismo fueron, literalmente, destrozados en Nóvgorod. Preso en el apetito de un por otro juego increíble Taylor Rochestie. El Nizhny anotó 109 puntos en un verdadero festival de agresión contra un equipo que durante la primera fase había marcado 65 y 66 puntos, respectivamente, sudando sangre. En este concreto partido consiguió marcar tantos sólo en el primer tiempo.
En este juego con los rusos pasó lo que llamamos “hasta sus pollos ponen huevos.” Aun en los ataques donde el Efes supo defenderse bien para enviar ayudas, rotarse bien, el Nizhny logró anotar canastas fuera de plano, la lógica y el sistema.
Los rusos entraron en el partido a todo gas y con el dueto Rochestie – Parakhouski como eje crearon muchos problemas. El escolta estadounidense creaba grietas después de driblar obligando a la defensa cerrar y con pases al perímetro creyó muchos tiros abiertos para Antonov, Kinsey y Thompkins.
Los pick and roll con Parakhouski eran casi todos exitosos ayudando al gigante bielorruso acabar el primer tiempo con 19 puntos y 9/11 tiros. Los pases verticales y diagonales por parte de Rochestie eran de seminario y muy rápidos por lo que la defensa no tenía bastante tiempo para hacer rotaciones correctas.
Rochestie creaba desde la posición 2 cuando en la pista estaba al mismo tiempo Khvostov, principalmente después de los bloqueos y libre de llevar el balón. Hubo una significativa contribución de Kinsey quien se desempeñó como segunda fuente de creación y ejecución con su muy buen juego de aislamiento y aprovechó de forma perfectamente los desajustes defensivos que se le presentaron.
Es necesario hacer referencia al muy buen trabajo de Thompkins en el ataque que sacó el máximo provecho de sus ventajas, yendo al poste cada vez que tenía a Saric como rival personal o jugando más con los pies en el perímetro con su buen tiro de media y larga distancia contra Bjelica.
El Nizhny además de su crescendo en ataque tenía el impulso necesario en defensa especialmente en la primera mitad, pero también durante dos o tres minutos en la segunda acompañado de estallidos ofensivos. Parakhouski era piedra angular contra Lasme y Krstic, mientras que Thompkins jugó excelentemente contra el all-around juego ofensivo de Saric que nunca pudo encontrar su tempo. Los turcos sí que anotaron 90 puntos, pero la mayoría era en los momentos cuando el Nizhny se había relajado y de hecho no le dañaron en absoluto.
El entrenador Ivkovic seguramente pasó una de las noches más difíciles y eso se manifestaba en sus reacciones en el banco. Sus jugadores aun no cometían faltas necesarias para detener el ritmo. Ivkovic cambió a todos los escoltas que marcaban a Rochestie enviando ayudas tanto al lado débil como al fuerte sin siquiera poder molestarlo. El estadounidense como un verdadero maestro anotó 19 puntos y dio 15 asistencias.
¡REALMENTE FENOMENAL!