Por Panos Katsiroumpas/ info@eurohoops.net
En la lupa de esta semana se puede encontrar el análisis del partido del Olympiacos contra el CSKA Moscú y del Galatasaray ante el Maccabi y también los puntos decisivos del resto de los partidos de una jornada muy llena de acontecimientos.
El Estrella Roja tiene enormes problemas en cinco contra cinco. No puede crear grietas y no hay una amenaza constante excepto a Marjanovic. Con 20 posesiones más (resultado de la diferencia de rebotes ofensivos y pérdidas) y con el total de 85 ataques han anotado sólo 68 puntos contra el Zálgiris.
Cuando tu equipo tiene 0/18 en tiros de tres y esperas ganar el partido con el decimonoveno intento no tienes muchas posibilidades. Marcus Williams tomó el tiro de la victoria, pero falló y los serbios terminaron con 0/19 detrás de la línea de 6,75cm.
Sergio y Rudy están aquí. Sentenciaron al Barcelona con una actuación magnífica. Ejecutaban en uno contra uno, detrás de los bloqueos, con intrusiones y creaban ocasionas de gran manera. Su balance final fue 45 puntos y 11 asistencias.
La defensa del Barcelona estaba para llorar. Los catalanes no pudieron en cualquier momento parar el tempo del Real. Los azulgranas eran suaves para presionar el balón, debilitados en el tratamiento de los bloqueos, lentos en transición y malísimos en uno contra uno.
Lo hemos dicho más de una vez desde esta columna. El dúo Bjelica- Vesely establece la diferencia en el atletismo, la velocidad y la defensa del Fener. Lo han vuelto a hacer en el tercer cuarto del partido contra el Laboral Kutxa.
Con dicha defensa el Laboral y el Fenerbahce no pueden ir muy lejos en la competición. Por mucho talento ofensivo que haya con tal defensa no serán capaces de responder en los partidos con rivales de mayor calidad.
La defensa con presión por toda la cancha y el atletismo de los jugadores de perímetro crearon enormes problemas al Panathinaikos que tenía una decepcionante circulación y terminó la primera mitad con sólo 22 puntos en su haber, su peor marca de lo que viene de la temporada.
El otro Panathinaikos apareció en la segunda mitad. Con una defensa de presión notable sobre el balón, con pasillos cerrados, la imposición en la parte de rebotes y menos pérdidas. En la parte ofensiva los verdes extendieron su ataque y se aprovecharon de los desajustes defensivos y los segundos ataques.
Granger, Vázquez y Kuzminskas fueron los jugadores clave para el Málaga. El primero fue increíble en el segundo y el último período, anotando 29 puntos y repartiendo 5 asistencias en 25 minutos. El lituano atacaba constantemente en el poste aprovechándose del desajuste defensivo que había con Kinsey, y además lo limitó en defensa. Vázquez era majestuoso en las ayudas y en las defensas contra Parakhouski.
Dos polos no son suficientes. A pesar de que Rochestie estaba a su nivel habitual y Thompkins anotaba a voluntad, la aparente falta de alimentación de Parakhouski no permitió amenazar constantemente en la pintura para el Nizhny y eso le costó mucho al equipo ruso.
Un momento, un año entero. El último ataque del EA7 Milano es representativo de su imagen este año. No hay bloqueos lejos del balón, ningún intento de crear desajustes defensivos, un simple juego de acarado con Hackett fallando su tiro. Los italianos ya están a 1-5.
La subida del límite de Perperoglou. Una gran actuación en la segunda mitad por parte del alero griego que anotaba de cualquier modo contra la defensa italiana. El rendimiento del MVP de los turcos era un partido habitual en el poste, tiros desde el perímetro incluso abriendo pasos y acabando momentos con penetración.
¡El truco de Duda! El Sabio jugo en el último cuarto con Bjelica de pívot dejando a Krstic y Lasme en el banquillo. Con este esquema encontró flexibilidad en defensa, al menos en comparación con Krstic, mientras que montó algunas jugadas para que Bjelica pudiera enfrentar a Samuels en las piernas y anotar como lo hizo.