Por Antonis Stroggylakis / info@eurohoops.net
Han pasado casi 13 años desde que la selección estadounidense perdió un partido oficial.
El 1 de septiembre de 2006, Grecia venció a Estados Unidos por 101 a 95 en la semifinal del Mundial. Aquella debalce para el entonces favorito del torneo le sirvió como una lección que condujo a récords impecables y medallas de oro en el Mundial y los Juegos Olímpicos que siguieron.
El equipo de los Estados Unidos había sido considerado invencible sin siquiera pisar la cancha. Aunque no este año.
Por primera vez en 13 años, Estados Unidos parece vulnerable. Las numerosas ausencias (entre ellas, las de Anthony Davis, James Harden, Damian Lillard y CJ McCollum) le han robado a EE. UU. algunas de sus cualidades inigualables. Y hay un par de equipos que están listos para aprovecharlo y potencialmente derrotar a los norteamericanos en un partido eliminatorio.
Serbia
Tras la caída de Estados Unidos ante Australia en un partido de preparación que tuvo lugar en Melbourne, Serbia es el único equipo que llega invicta al Mundial. La FIBA ya lo colocó en el primer lugar en dos clasificaciones consecutivas, y son ampliamente considerados como la amenaza número uno a los EE.UU.
A pesar de la lesión y la ausencia esperada del capitán Milos Teodosic, Serbia es un equipo que combina calidad, experiencia, talento y conocimiento sobre cómo competir en este tipo de torneos, y ganar medallas.
El pívot All-Star, Nikola Jokic, uno de los jugadores de baloncesto más fenomenales de nuestra edad desde cualquier punto de vista, está de regreso con el “Orlovi” por primera vez desde los Juegos Olímpicos de 2016. Además, hay Bogdan Bogdanovic, Nemanja Bjelica, Boban Marjanovic y el recién adquirido escolta de Memphis Grizzlies, Marko Guduric. Vasilije Micic, que viene de un temporadón en la Euroliga, asumirá la responsabilidad de dirigir el juego junto con Stefan Jovic.
Serbia debería ser uno de los equipos más peligrosos del torneo en cuanto al tiro. Hay seis jugadores (Bogdanovic, Bjelica, Guduric, Micic, Jokic y Marko Simonovic) que pueden lanzar el balón, digamos, 5/5 triples en cualquier noche, y unos más (Jovic, Vladimir Lucic, Stefan Bircevic) que pueden castigar a la defensa del equipo rival cuando nadie les marca.
La historia reciente no está a favor de Serbia, ya que EE. UU. prevaleció fácilmente tanto en la Final del Mundial de 2014 como en la Final de los Juegos Olímpicos de 2016. Aquí hay otra razón por la cual los jugadores de Sasha Djordjevic querrán detener esta carrera y aprovechar la oportunidad para acabar primeros.
España
En el pasado, el equipo español había sido más que competitivo cuando se enfrentó incluso a un equipo estadounidense lleno de estrellas. Si los dos combinados se encuentran este año, no veremos una batalla tipo “Vengadores” como la de la Final de los Juegos Olímpicos de 2012, pero definitivamente será algo divertido de ver.
Una combinación de veteranos experimentados, líderes prometedores de próxima generación y jugadores ansiosos por demostrar su valía en una fase final del Mundial, crea el equipo de 12 hombres que ha elegido el seleccionador Sergio Scariolo. Pau Gasol no estará presente debido a una lesión (él “mataría” para jugar según Scariolo) pero su hermano Marc, flamante campeón de la NBA, estará en China para liderar los esfuerzos de la ÑBA.
Willy y Juancho Hernangómez, los “sucesores” no oficiales de los hermanos Gasol, tendrán un papel destacado en esta versión de la selección. La Copa del Mundo es su oportunidad de destacar no como jugadores complementarios sino como protagonistas. Ricky Rubio dirigirá el juego, mientras que Rudy Fernández aportará experiencia y conocimientos tan necesarios en los torneos internacionales.
Él y Marc son los únicos jugadores de la plantilla de España que también fueron miembros del equipo que ganó el Mundial en Japón en 2006.
Ah, y también está Sergio Llull…..