Por Panos Katsiroumpas/ info@eurohoops.net
La Final Four está a la vuelta de la esquina y sólo a unos pocos días de su arranque la columna de la lupa intentará analizar las dos grandes semifinales que tendrán lugar en Madrid. En esta parte nos centraremos en la segunda semifinal entre el Real y el Fenerbahce turco.
Análisis
Si habláramos sobre este duelo al comienzo del año, lo más probable es que hablaríamos sobre un partido de “correr y tirar”, repleto de tiros, un ritmo rápido y un alto marcador. Sin embargo, a lo largo del año el Fenerbahce ha cambiado considerablemente su identidad tras la llegada de Zisis, la lesión de Hickman y una excelente actuación de Vesely en la posición de ‘5’, que proporcionó el Fener con grandes oportunidades para abrir su defensa y cambiar sin arriesgar mucho.
El Real es un equipo de ritmo, un equipo que se basa en sus excelentes bases y escoltas. Es el equipo con tiene el más alto promedio de posesiones siendo el segundo mejor ataque de la Euroliga de este año. Tres bases de los blancos (Rudy, Llull, Sergio Rodríguez) anotan casi el 40% de los puntos y distribuyen el 60% de asistencias del equipo español. Los españoles tienden a crear condiciones para poder ejecutar en los primeros segundos de sus posesiones. Con unas cortinas lejos del balón, generalmente para Rudy y Carroll, más frecuente cuando está en la cancha, ellos, desde el principio, tratan de forzar un desequilibrio en la defensa.
Más allá de eso, los madridistas funcionan fuera de un sistema y en su mayoría la decisión sobre el desarrollo del ataque la tomara los jugadores que mejor instinto tienen. Son raras las veces cuando los Vikingos marchen orientados a un juego en el poste y la mayoría de las bolas llega allí tras una distribución o como último recurso al final de un ataque. Echemos un vistazo a dos de las jugadas más características del Real que se iniciaron con la forma en que describimos.
Rudy toma un bloqueo en el poste alto y empieza la jugada de uno contra uno con Reyes abriendo el espacio.
Carroll se libra del bloqueo y va al cambio, dejando a toda la defensa del Barcelona fuera de la jugada. Con un pase de un jugador grande a otro la jugada se termina de una manera fácil.
Carroll es una base importante en la parte ofensiva y cuando él está en la cancha, con un montón de cortinas lejos de la pelota para que tenga el tiempo para ejecutar – ya que el americano es un francotirador – o para un pase para aprovecharse de unos desequilibrios de la defensa rival. Cuanto más la defensa del rival pare el ataque de los madridistas y lo tarde que llegue un tiro en las posesiones de los blancos, más posibilidades hay de que los españoles no suban el marcador. Sergio es el Factor X de este equipo. Cuando se encuentra en un buen día cubre toda la cancha, pasa con de forma excepcional y puede crear muchas rupturas para ejecutar él mismo o hacer un pase para unos tiros abiertos.
Fenerbahce/Ulker
Por otra parte, el Fenerbahce es un equipo que también confía mucho en sus jugadores del perímetro. Principalmente con Zisis y Preldzic organizando el juego y creando jugadas en la parte ofensiva, con Goudelock y Bogdanovic jugando del aclarado, en su mayoría, y también llevándose muchos tiros abiertos desde el lado débil.
Sipahi consigue bloqueos y penetra. Cuando la defensa se cierre hacia el interior él suele pasar al lado débil para un tiro abierto de Bogdanovic.
La gran diferencia en el juego ofensivo de los turcos la establece la tremenda calidad de Bjelica en la posición ‘4’. Un jugador que puede ejecutar incluso desde 8 metros, y con la misma facilidad puede organizar jugadas de bloqueo y continuación, jugar en los postes y pasar en cada oportunidad. Puede cubrir toda la cancha y, junto con Vesely, quizás sean el mejor dúo de bigmen en la transición ofensiva.
Jugando de organizador Bjelica hace el pase a Erden que ha conseguido un bloqueo dentro de la pintura y termina el movimiento con facilidad.
El Fenerbahce intenta meter la pelota en el poste principalmente con Vesely, pero sobre todo cuando juega en la posición de ‘4’, donde debido a su potencia y explosividad puede hacer un daño real. Un factor importante del partido será la actuación de Goudelock. Cuando el americano es en un buen día anotando con un alto porcentaje su equipo suele ganar. En cuanto a la parte defensiva, los turcos parecen un poco más fuertes gracias a una increíble capacidad de Vesely en esta parte. El checo juega excelentes defensas de cambio, es un buen bloqueador y cierra el pasillo hacia la canasta de su equipo.
Tanto la batalla de rebote como el ritmo del partido van a ser cruciales con ambos equipos siendo excelentes en este sentido. Si el partido se inclina hacia una transición controlada será algo que convendrá al equipo turco, mientras que si el ritmo se abre completamente el Real tendrá una gran ventaja.
Las claves del partido
Para el Real
- Abrir el ritmo, aprovecharse de las habilidades de sus jugadores del perímetro.
- Retener a Goudelock y Bjelica.
- Conseguir rebotes defensivos, sin permitir ningún impulso para Vesely a través de segundas posesiones.
Para el Fenerbahce
- Controlar el ritmo, ser paciente en la distribución del balón, buscar siempre la mejor opción.
- Volver rápido a defender.
- Usar a Bjelica en la parte ofensiva, especialmente cuando se enfrenta a un excelente pero lento Reyes que es más un jugador de la pintura.
Puestos a predecir, daríamos una pequeña ventaja al Real Madrid, debido a la ventaja de campo, pero si el Fenerbahce ganara no sería necesariamente una gran sorpresa.